Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 1406

Marta parecía tener un par de ojos en la puerta, observando claramente cada movimiento de Antonio.

Antonio no se sorprendió: —Está bien, señora Marta. Ya es tarde, debería intentar descansar también.

Pensaba que la señora Marta había vivido demasiadas cosas en esta vida, y este evento, además de ser un golpe para ella, también le había robado un poco más de esperanza de vida.

La señora Marta ya estaba aguantando como podía.

Ella misma no lo decía, pero el médico también había insistido en que mantuviera un buen estado de ánimo.

Sin embargo, él había averiguado por su cuenta con el médico que la señora Marta realmente estaba sosteniéndose con un hilo muy fino al último halito de vida que le quedaba.

Y todo porque el señor Alejandro aún no había recuperado la memoria, y también quería ver a su bisnieto, la creencia de que esto sucediera y mejorara la mantenía en pie.

Pero ahora, lo que debería haber sido un encuentro en unos pocos meses con el bisnieto se había convertido en una espera de cinco años.

Estos cinco años serían un largo proceso tanto para el señor Alejandro como para la señora Ana, y también para la señora Marta.

De alguna manera, él sentía que la señora Marta no podría aguantar mucho más, y eso le preocupaba aún más.

Marta, al oír cerrarse la puerta de la habitación contigua, también suspiró suavemente.

¡Ay!

Sabía que lo que Edgardo había dicho antes era todo cierto.

Primero, Ana le dijo a Fernando que ya no necesitaban buscar a Edgardo, porque Edgardo ya no usaría objetos malignos para hacer daño a las personas.

—¿Solo porque él dice que no hará daño, vamos a creerle? ¡Nunca imaginé que el fuera el hermano de Isabel! Edgardo es alguien a quien había olvidado completamente. No es una persona de fiar, sus palabras no pueden tomarse completamente en serio. Dice que no usará objetos malignos para hacer daño, pero podría ser solo para que bajemos la guardia y luego continúe haciéndolo. —Fernando parecía convencido.

En los últimos años, debido a los objetos malignos, realmente había llegado a odiar a la persona detrás de todo esto.

Ahora que sabía que esa persona era un viejo conocido, estaba aún más furioso.

Después de pensar un momento, Ana estaba a punto de explicar por qué deberían creer lo que Edgardo decía, cuando de repente Fernando pareció recordar algo, y sus ojos se agrandaron.

— Recordé algo del pasado. ¿Y si Edgardo está usando un nombre falso, haciéndonos creer que es el hermano de Isabel? ¿Qué tal si en realidad no lo es? Recuerdo que una vez dijo que le gustaba Isabel, y todos le aconsejamos que no pensara así porque siempre lo vimos como alguien con una personalidad paranoica y propenso a actuar de manera irracional. Definitivamente no es el hermano de Isabel. La persona que usa objetos malignos para hacer daño seguramente lo está usando a él como distracción para desviar nuestra atención. —Fernando cada vez estaba más convencido de su teoría.