Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 1445

—Después de que todo esté hecho, me pagarás 7000 dólares. —Repitió el tipo.

Lucas, quien siempre había valorado mucho el dinero, vaciló al oír la suma de 7000 dólares.

El tipo soltó una risa: —También puedes arrepentirte y no aceptar, pero sin mi ayuda, es imposible que tú y esa chica estén juntos. Ella proviene de una familia distinguida y tiene un hermano muy capaz que impedirá que ustedes estén juntos.

Al escuchar esto, Lucas no vaciló más: —¡De acuerdo! ¡Acepto!

...

Marta había comenzado a mejorar gradualmente con la compañía de Ana y Alejandro en los últimos días.

Ya podía levantarse de la cama y caminar un poco.

Sin embargo, aún no tenía mucha fuerza, tan solo podía bajar las escaleras desde el segundo piso con la ayuda de Ana y después disfruta viendo televisión con ella.

Las dos comentaban sobre los personajes en la televisión, de manera relajada y feliz.

En esos días, Marta todavía no podía comer mucho, apenas logra tomar unos sorbos de arroz caldoso y no deseaba comer más, por lo que a menudo necesita inyecciones nutritivas para mantenerse.

En realidad, Marta no se sentía tampoco muy bien y su ánimo estaba decaído, solo atinaba a ver televisión durante media hora antes de querer dormir un poco.

Ana solía siempre estar tranquila a su lado.

En cuanto a Alejandro había estado muy ocupado en los últimos días, desayuna y solía irse temprano, pero no importaba cuán tarde fuese, siempre regresaba a casa para poder ver a Marta a la mañana siguiente.

Los tres estaban muy unidos.

Aunque Marta sabía muy bien que no le quedan muchos días de vida, cada día trataba de buscarle la parte buena a la vida.

—Abuela, ¿a quién crees que realmente ama la protagonista? —Preguntó Ana, señalando a la protagonista del drama en la televisión.

Habían estado viendo esta serie durante varios días.

Marta frunció el ceño: —¿Qué viene a hacer aquí?

Xavier era un hombre de intenciones claras, solo aparecía cuando necesitaba algo.

Desde que se casó y entró a la familia García, siempre había despreciado a Xavier.

Además, por las acciones repugnantes de Xavier a lo largo de los años, ahora que estaba cerca de la muerte, no quería fingir amabilidad.

—Abuela, no hay necesidad de ver a gente que no quieres ver. —Dijo Ana, también frunciendo el ceño.

Estos últimos días Marta había estado de mejor humor, no valía la pena arruinarlo por algunas personas desagradables.

Marta asintió y le dijo a Antonio: —Ve y dile que estoy durmiendo y no puedo recibirlo, que le diga a ti cualquier cosa que necesite.

Antonio se apresuró a salir.