Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 1493

Nunca había estado en esta situación antes.

Por eso, ella estaba muy preocupada.

—Lucas, ¿qué está pasando contigo?

Justo en ese momento, coincidió que alguien la llamó.

Estaba a punto de contestar cuando vio que el departamento financiero de la empresa era quien llamaba, dijo: apresurada.

¿Por qué la llamaría el departamento financiero sin motivo aparente?

¿No será que le dirán una vez más que no hay dinero en las cuentas de la empresa?

Ella también sabía que la empresa no tenía dinero durante estos últimos días y estaba haciendo todo lo posible por encontrar una solución. Sin embargo, en Ciudad A, no estaba familiarizada con nada, y lo único en lo que podía confiar, era Lucas, pero no estaba disponible para contactarlo.

Tenía mucho miedo que en realidad hubiera algo malo detrás de ello, decidió contestar la llamada.

—Dime, ¿qué necesitas? —Preguntó Verónica con impaciencia.

El financiero de la empresa respondió: —Presidenta Verónica, ¿ha visto los temas populares en la ciudad?

—¿Temas populares? ¿Por qué iba a mirar eso? Si tienes algo que decir, dilo directamente, no tengo tiempo para charlar sobre esas cosas ahora. —Respondió Verónica algo confundida. :

La mayoría de los empleados de la empresa fueron contratados por Lucas. ¿Cómo podía ser tan incompetente este financiero?

Además, era después del horario laboral, y él estaba hablando de temas populares con su líder.

Ella no tenía interés alguno en cosas sin importancia, ni siquiera en algunos actores de cine, lo que le gustaban eran las estrellas internacionales de Arena Blanca.

Así que, ¿el financiero estaba tratando de acercarse a ella?

¡Eso era muy poco profesional!

Al otro lado de la línea, el departamento de finanzas escuchó el tono de Verónica y no pudo evitar poner asombrarse. La tal presidentica Verónica, a pesar de que era su líder, lideraba con mucha estupidez, una boba completa. Ni siquiera se dio cuenta de que Lucas, un joven, la había engañado. Y, encima, se creía superior, pensando que estaba por encima de los demás.

Si no fuera porque temía que no le pagaran su salario, ni siquiera se habría molestado en llamar.

—Presidenta Verónica, se trata de los temas populares sobre el señor Lucas, ahora todo el personal de la empresa lo sabe, si usted, presidenta Verónica no está al tanto, debería consultar en línea ahora mismo. —Dijo el financiero de la empresa con paciencia.

No, no, eso no podía ser.

—Lucas me ama tanto, ha hecho tanto por mí, ¿cómo podría engañarme? Seguro que es esa chica que no deja de acosarlo, alguien hizo estas fotos tan realistas para incriminarlo. ¡Tiene que ser eso!

Aunque decía esto, el rostro de Verónica estaba lleno de pánico.

Sus manos temblaban sin cesar mientras sostenía el celular.

El celular casi se le caía de las manos.

—No, no podía ser, Ana me está mintiendo, ¡ella no soporta verme bien y sin lugar a dudas me mintió!

...

Después de ducharse, Ana se tumbó en la cama y continuó una videollamada con Javier.

—Javier, ese Lucas es un imbécil.