Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 1578

Después de que Ana gestionara la pulsera, se marchó del set.

Cuando llegó a casa, justo estaba por contactar a Lourdes, pero Lourdes angustiada la llamó primero.

—Joaquín descubrió a través de un amigo que quien le dio la pulsera a Dolores fue David, un amigo de la infancia de él. Crecieron juntos en el mismo barrio. Aún no estamos seguros si David sabía que la pulsera era un ente maligno o no, pero creo que muy pronto lo aclararemos. —dijo Lourdes.

Ana respondió: —Acabo de ver a Dolores; ella me entregó la pulsera para que la gestionara y me dijo que fue David quien se la dio. Si ustedes ya lo investigaron por su parte, entonces pronto se esclarecerá este incidente. Tú y Joaquín deben tener mucho cuidado de ahora en adelante.

—Sí, no te preocupes. Dolores es una buena chica. Afortunadamente descubriste que estaba bajo la influencia del ente maligno. Ella me llamó hace poco, se disculpó y luego tuvo que irse rápidamente a filmar, así que no hablamos mucho del tema, —el tono de Lourdes se relajó muchísimo.

Ana también tenía una excelente opinión de Dolores: —Ella en realidad era una buena chica, muy inteligente y decidida.

Unos días después,

Lourdes le informó que habían confirmado que David estaba detrás de todo esto.

Fue simplemente por celos hacia Joaquín.

En los últimos años, Joaquín había tenido mucho éxito en su trabajo y era muy valorado por sus líderes. Mientras tanto, David siempre era comparado de manera desfavorable con él por su familia, lo que lo llevó a desarrollar sentimientos de envidia y a ser manipulado fácilmente por algunas personas, lo que lo llevó a idear este malévolo plan.

De pronto David también intentó de otras maneras dañar la dignidad de Joaquín, pero como Joaquín era una persona íntegra y nunca cometió errores en su trabajo, David no pudo usar ninguna de sus maliciosas ideas y, finalmente, optó por utilizar un ente maligno y luego implicar a Dolores en todo este embrollo.

Aunque no esperaba que un método tan indirecto pudiera ser descubierto.

Tampoco esperaba que Lourdes conociera a Dolores.

En fin, este asunto por ahora había llegado a feliz término.

—

El fin de semana, Ana y Alejandro asistieron entusiasmados a una cena familiar en casa de la señora Elena.

Hoy, aparte de Manuel, casi todos estaban presentes.

Después de la cena, Ana y Alejandro se detuvieron a mitad de camino a casa.

Tal vez porque había perdido un hijo hace años y aún sentía la nostalgia.

Alejandro, abrazándola más fuerte, simplemente dijo: —Está bien.

—Ya es tarde, deberíamos volver a casa. —dijo Ana al notar sorprendida que ya eran las diez de la noche.

Había cantidad de gente pasando por su lado, y con el tráfico y las luces de la calle, no se habían dado cuenta de la hora.

—Vamos, ponte mi chaqueta. —dijo amable Alejandro, quitándose la chaqueta y colocándola cariñoso sobre los hombros de Ana.

No habían sentido el frío antes, pero de repente el viento se tornó más frío.

Ligeramente helado.

Después de caminar un trecho.