Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 1607

Victoria no entendía por qué un ladrón podía ganar la confianza de tantas personas.

¿Y Alejandro? ¿Por qué él confiaba tanto en Ana?

En su vida pasada, se enamoró de ella a primera vista, la tomó por la fuerza, amándola tan profundamente que era imposible que en esta vida, al verla de nuevo, no sintiera nada.

Ella nunca había creído que Ana y Alejandro estuvieran realmente enamorados.

Todo era una actuación.

Un vil y falso show.

¡Todo es un maldito engaño creado por Ana!

—Eduardo, ¿creíste que si no me dejabas ver a Alejandro, no podría verlo? Otros no podían encontrar la oportunidad, pero yo sí. ¡Yo sí puedo! Haré que Alejandro recuerde todo, y que Ana no pueda seguir acosándolo de manera descarada.

Bianca, parada fuera de la puerta, escuchaba atenta el monólogo de Victoria en la habitación.

No podía evitar preocuparse.

Su hija ha crecido bajo su cuidado directo, y ella conocía muy bien su carácter mejor que nadie. Victoria siempre había sido excelente en sus estudios y de carácter muy dulce, siempre encontraba una manera de resolver los problemas, como ahora que la familia enfrentaba dificultades, ella también estaría dispuesta a ayudar.

Pero...

Nunca la había visto tan irritable.

Podía escuchar cada palabra claramente.

Cada palabra cargada de mucho resentimiento y furia, que incluso las personas más cercanas podían sentir.

—Victoria, ¿ya cenaste? —Preguntó con preocupación.

Ella anhelaba hablar con su hija y saber qué había estado pasando últimamente.

—¡No me jodas más la vida! ¡Ya bien claro te dije que no vinieras a molestarme! ¿Por qué sigues haciéndolo? ¿No sabes que estoy de muy mal humor ahora? Claro, ustedes no saben nada, ¿cómo podrían saberlo? ¡Sin mi permiso, no puedes volver a molestarme! ¡Ustedes son una inmensa carga para mí, lo sabes?

...

Cerca del final de la jornada laboral, Ana recibió una llamada de Javier.

—¿Hermana, tienes tiempo esta noche para cenar juntos?

—Claro, ¿qué te gustaría comer? Yo invito.

Ana se sorprendió un poco, Javier solía estar muy ocupado, y que los hermanos se llamaran de vez en cuando ya es bastante, pero hoy ha tomado la iniciativa de invitarla a cenar.

—Yo invito, hermana no te preocupes.

—Está bien.

—Te enviaré la dirección del restaurante.

Después de enviarle la respectiva ubicación del restaurante a Ana, Javier se pone serio.