Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 1804

—Está bien, Beatriz. Me cuidaré muy bien.

Josefina hizo una promesa.

Después de colgar.

Poco después, las llamadas de la abuela y los tíos comenzaron a llegar desbordadas una tras otra, todos querían acompañarla a salir y divertirse.

Aunque durante estos tres años no tuvo a sus padres junto a ella, el cariño de sus familiares la hacía sentirse acompañada y cálida.

Después de hablar con todos ellos, finalmente tuvo tiempo de observar con detenimiento la habitación de huéspedes donde se alojaba.

El hotel estaba ataviado con un estilo bastante particular.

Un compañero de clase vino de visita al lugar el verano pasado, se quedó aquí unos días y luego se lo recomendó.

Vino a esta ciudad antigua también por indicación de la anciana, quien le dijo que debía llegar lo antes posible.

Abrió entusiasmada la ventana y miró hacia el amplio patio del hotel.

La decoración antigua le daba la sensación de estar en una época pasada.

Una ilusión de viaje en el tiempo, en un instante.

—Cuando encuentre a mis padres, los traeré aquí para vivir esto paraíso juntos. —Dijo en voz baja.

Justo cuando estaba a punto de cerrar la ventana, de repente alguien salió de detrás de un gran árbol.

Era un joven vestido con ropa tradicional.

El joven era atractivo, con rasgos sorprendentemente guapos, aunque su vestimenta tradicional estaba un poco desgastada, al mirarlo de cerca se notaba con claridad que el dobladillo y otras partes de su vestimenta habían sido remendadas.

A pesar de su atuendo ajado, el orgullo del joven y su aura sombría como el hielo eran excepcionales, ella nunca había visto a alguien así.

Acababa de llegar a la ciudad antigua, y mientras caminaba había visto a varias personas vestidas con ropas tradicionales y túnicas largas y ajustadas.

Pero la presencia de esta persona la verdad era muy poco común.

Definitivamente tenía un carácter único.

La verdad no pudo evitar mirarlo un poco más.

Justo cuando estaba a punto de cerrar la ventana, ¡comenzaron a caer copos de nieve!

—¿Dios mío, ya está nevando a principios de otoño?

¿El clima de este año era tan extraño?

El cielo estaba completamente despejado cuando ella llegó.

Echó otra mirada furtiva al joven y luego cerró de inmediato la ventana.

Volvió a pensar en el joven que había visto. Si había sido solo una ilusión, ¿por qué se sentía tan real?

—No había traído ningún objeto maligno en este viaje.

En estos años, cuando las personas a su alrededor se encontraban con objetos malignos, ella se encargaba de ellos, y la anciana le había enseñado cómo debía manejarlos.

Ella era la única hija de Ana, Ana podía ver y sentir la presencia de objetos malignos, y ella también.

Sin embargo, ella preservaba los objetos malignos, eliminaba su maldad inherente y luego maximizaba los aspectos positivos de cada uno de estos objetos.

Había tenido contacto con varios objetos que podían causar ilusiones.

Con sus extraordinarias habilidades, no era fácilmente influenciable por objetos malignos, ni tampoco propensa a tener alucinaciones.

Claro, excepto por la anciana, quien podía aparecer frente a ella en cualquier momento.

Sin embargo, este año la anciana solo había aparecido una vez y, lo había hecho hace un par de días, diciéndole que viniera a la ciudad antigua.

Fortalecida, decidió no rendirse y abrió la ventana de nuevo.

Miró hacia fuera.

Esta vez, todo parecía normal, igual a lo que había visto previamente.