Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 258

—¡Casi me engañas!

—¿Estás probando mi vista? ¡Este es Alejandro! ¿Será que cuando estábamos comiendo bistec, lo viste tan guapo que decidiste quedártelo para ti? Esta acta de matrimonio está muy bien editada, ¿con qué aplicación la hiciste?

—¡Dámela ya! Yo también quiero hacer un acta falsa de matrimonio con Mauricio. No podemos casarnos de verdad, pero al menos podemos tener una falsa.

Beatriz no pudo contener la risa cuando vio que el novio era Alejandro.

¡Casi la engañan!

El acta de matrimonio estaba tan bien editada que parecía real.

Ana, entre lágrimas y risas, respondió:—Es Alejandro, no te equivoques, la persona con la que me casé es él. Nos casamos de manera apresurada.

—Sí, sí, claro que te creo,—asintió Beatriz con fuerza, apenas pudiendo contenerse. ¿Acaso Ana no se daba cuenta de que su broma era demasiado obvia?

Ana se quedó sin palabras.

Incluso con la foto del acta de matrimonio en la mano, Beatriz seguía sin creerle.

Parecía que aunque le mostrara el acta de matrimonio en persona, Beatriz seguiría sin creer que era real.

Mientras charlaban, la escena de Manuel y Mauricio ya había terminado.

Justo en ese momento, Ana recibió una llamada de Manuel.

—Anita, ¿ya llegaste?

—Sí, ya llegué, segundo hermano,—saludó Ana a Manuel con la mano.

—Te veo, voy a recogerlas. Ya hablé con Mauricio, él sabe que mis dos hermanas lo admiran mucho y está esperando para tomarse fotos con ustedes antes de irse.

—¡Eso es genial!

Ana y Beatriz siguieron a Manuel hasta la zona de descanso del set de rodaje.

Allí conocieron a Mauricio.

Ana añadió:—Soy fan de las películas del profesor Mauricio gracias a Beatriz. Tus habilidades de actuación y las escenas de acción son realmente impresionantes.

Ella no solía ser fanática de nadie.

Si tuviera que nombrar a su ídolo, solo sería la abuela Ruiz.

Por supuesto, apreciaba mucho el talento de Mauricio y lo admiraba como persona. Manuel le había contado que, aunque Mauricio llevaba años en la industria, nunca se había visto envuelto en escándalos, aparecía poco en programas de variedades, y tenía una excelente reputación en el medio. Los directores con los que había trabajado siempre hablaban maravillas de él.

Viendo a Beatriz, que irradiaba la energía de un pequeño sol, Mauricio esbozó una sonrisa más sincera.—Es un honor que me admires tanto.

Al oír esto, Beatriz no pudo evitar sonrojarse.—¿Podemos tomarnos una foto juntos?

—Claro, por supuesto.

Beatriz inmediatamente jaló a Ana para que se uniera a la foto con Mauricio.

Manuel se encargó de tomarles la foto.