Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 390

—¡Están locos! Alejate de esas personas en el futuro, no te acerques, ¡son demasiado descarados!

Advirtió Pablo a Ana.

Tras escucharlo, Ana no mostró sorpresa, pues esto era típico en aquella familia.

—Sí, los evitaré cuando los vea, —respondió Ana.

Pablo se tranquilizó. —No te preocupes, si se atreven a molestarte de nuevo, ¡no los perdonaré!

Ana sonrió. —No vale la pena gastar tiempo en ellos.

Mirando la hora, añadió: —Vamos, se acabó el trabajo.

—Está bien, voy a buscar a mi abuelo.

—Hasta mañana.

De camino a casa en su coche, Ana recibió una llamada de Beatriz.

—¡La familia González realmente puede hacerlo! ¡Solo les faltó escribir 'descarados' en la cara!

—¿Tú también lo sabías?

Parece que la familia González realmente había armado un gran escándalo esta vez.

Beatriz aún no había terminado su jornada laboral; hoy Mauricio estaba filmando por la noche, y ella, siendo una pequeña asistente, definitivamente tenía que acompañarlo.

En ese momento no tenía mucho que hacer, así que aprovechó para mirar su teléfono.

Resulta que vio el tema candente del momento.

Realmente, la familia González ahora sería famosa aunque no quisieran.

—Ahora casi todos en la ciudad A lo saben, Sergio definitivamente no podrá seguir desarrollándose en el mundo del entretenimiento, he escuchado que incluso sus seguidores lo han abandonado, esto es un colapso total de su imagen, ¡justo ahora la gente estaba discutiendo sobre esto! —Beatriz nunca había pensado mucho sobre cómo era el mundo del entretenimiento.

Ahora descubre que es muy difícil progresar en este campo.

Si uno no se regula estrictamente, es fácil colapsar completamente y perder todo lo que tiene.

Mira a Sergio, no es más que un ejemplo.

¡En menos de dos horas, su imagen pública se desplomó por completo! ¡Perdió todo! Ahora enfrentará todo tipo de compensaciones costosas.

Allí vio a Carmen de rodillas, abrazando a Elena.

No se sabía cuánto tiempo habían estado en esa posición, y la cara de Elena mostraba resignación.

Javier estaba furioso al lado.

Al ver a Ana, Carmen cambió su expresión y lanzó una mirada furtiva a Javier, claramente molesta porque Javier había llamado a Ana.

Ya en esa situación, no había lugar para arrepentimientos.

—Madre, ya no puedo seguir viviendo en esa casa, por favor, acógeme, ¡realmente no tengo a dónde ir! No tengo mucho dinero, ni siquiera puedo pagar un hotel. Con las noticias recientes sobre la familia González, mis amigos ni siquiera responden mis llamadas, mucho menos me ofrecen un lugar para quedarme. Realmente reconozco mis errores, ¿realmente tienes el corazón para verme vagar por ahí siendo tu propia hija?

Carmen decidió quedarse allí.

Una vez asentada, planeaba usar Instagram para aclarar algunos rumores.

No era que despreciara a los pobres y amara a los ricos.

Ella alternaba entre vivir con dos madres, no queriendo herir a ninguna.

De lo contrario, las diversas especulaciones y rumores externos eran demasiados, y no quería ser objeto de señalamientos.