Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 666

Desde niño, ya lo pensaba así.

Ahora, lo tiene aún más claro.

Ana se sintió algo divertida: —Anoche mi familia se quedó en el hospital, me preocupé toda la noche y no dormí bien. Vamos, voy a prepararme un café.

Pablo se rascó la cabeza, algo avergonzado: —Lo siento, fue un malentendido por mi parte.

Aunque fue un malentendido, todavía piensa que Alejandro es un cretino.

Ahora Ana simplemente está cegada por la apariencia de Alejandro.

Algún día, Ana verá la verdadera cara de Alejandro.

...

Al mediodía, Narciso y Kenia llegaron al hospital.

Kenia no entró a la habitación, se quedó esperando fuera.

Cuando Narciso apareció en la habitación, Doña García estaba comiendo su almuerzo.

Un arroz caldoso muy ligero y fácil de digerir.

—Mamá, ¿cómo te sientes hoy? —preguntó Narciso.

Doña García le echó una mirada fría a Narciso y dijo con tono indiferente: —Mucho mejor.

Al menos sigue viva y no ha muerto de rabia.

Todavía está bien viva.

Narciso está acostumbrado al desdén de Doña García hacia él a lo largo de los años, después de todo es su madre, y dijo con tono suave: —Traje una sopa nutritiva, consulté al doctor y tú puedes tomarla.

Fue Kenia quien la cocinó personalmente.

—Madre, después de todo soy su padre, no podría hacerle daño. —Narciso también frunció el ceño.

Eran cosas de su juventud.

Además, todos a su alrededor hacían lo mismo, simplemente no esperaba que su cuerpo no resistiera.

Doña García soltó una risa fría: —Quieres controlar los grandes asuntos de su vida, eso es precisamente hacerle daño. Alejandro es más disciplinado y autoexigente que tú, casi hasta un punto extremo y perverso; ciertamente eres su padre, pero no le llegas ni a los talones.

Eso era un hecho.

¿No es por eso que el Grupo García no se le había dado a Narciso?

Alejandro había tomado el control del Grupo García a los veinte años.

Y bajo su liderazgo, el Grupo García había prosperado más que nunca.

Narciso parecía como si le hubieran expuesto un secreto vergonzoso, su rostro se tornó extremadamente incómodo: —Madre, hablar de esto ahora no sirve de nada, lo más importante es que te cuides bien y te recuperes pronto.