Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 67

Resumo de Capítulo 67 : Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate

Resumo do capítulo Capítulo 67 de Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate

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¿Entonces, cómo podría ayudarla?

Sin embargo, los negocios son como un campo de batalla. La familia González ha estado ganando terreno en la ciudad A en los últimos años, arrebatando el pastel a muchos, por lo que no es sorprendente que hayan hecho enemigos invisibles.

—Es que nuestra Anita tiene suerte, justo se encontró con alguien que está poniendo en su lugar a la familia González. —comentó Francisco.

Ana escuchó el análisis de Francisco y pensó que tenía sentido.

Puesto que no podían adivinar quién había intervenido, lo importante era que el resultado fuera cómodo.

Ambos se sonrieron, una escena que Eduardo capturó desde el restaurante del edificio de enfrente.

Hoy tenía una cita con sus compañeros de universidad en un restaurante antiguo para comer carne asada, y no esperaba ver a la señorita González con un hombre en un restaurante de comida rápida.

El hombre estaba de espaldas, pero con solo ver su figura parecía ser un galán.

De lo contrario, no había manera de que la señorita González sonriera de esa manera tan relajada y bonita mirando al hombre.

Después de un conflicto interno, decidió enviar la foto al señor García.

Después de todo, el señor García era quien le daba de comer.

Además...

La anciana le había pedido que vigilara al señor García y a la señorita González y que aprovechara cualquier oportunidad para juntarlos.

Pensó que esta era una oportunidad.

Eduardo no podía evitar preguntarse si el señor García se pondría celoso al ver a la señorita González sonriendo tan radiantly a otro hombre.

Observando con más atención, se dio cuenta de que el hombre con Ana no parecía ser un pretendiente.

Decidió enviar varias fotos de inmediato.

Entonces, finalmente vio la cara del hombre.

¡Caray!

¡Era tan apuesto como su jefe!

Elegante y protector.

Un borracho casi choca con Ana, pero el hombre la protegió, colocándola bajo su brazo.

Eduardo rápidamente tomó más fotos y hasta grabó un video de sus espaldas mientras se alejaban.

¡Desde cualquier ángulo parecían una pareja perfecta!

Sin dudarlo, envió todo al señor García. Esta debía ser una dosis fuerte para él, ¿no?

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