Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 856

Resumo de Capítulo 856 : Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate

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Después de escuchar las palabras de Beatriz, Ana se tranquilizó.

Además, la personalidad de Beatriz es tal que no se deja intimidar fácilmente.

Como asistente de Mauricio, Beatriz no tiene oportunidad de interactuar con Rocío.

Pronto, Ana dejó a Beatriz en el set.

Después de estacionar el coche, Ana tomó un taxi y se fue.

Cuando Beatriz regresó, Bruno se mostró algo sorprendido: —¿De vuelta tan pronto? Pensé que no volverías hoy.

—Todo está manejado, así que volví a trabajar. Bruno, sigue con tus tareas. —Respondió Beatriz con una sonrisa.

Bruno asintió: —Entonces me voy al estudio.

En cuanto a algunos arreglos de trabajo de Mauricio, recientemente había hecho un plan y algunas promociones, teniendo que interactuar con muchas personas, casi perdiendo la noción del día y la noche.

Afortunadamente, Beatriz podía encargarse de muchas cosas por su cuenta.

Beatriz asintió y luego miró hacia Mauricio, quien estaba filmando.

La escena involucraba a varias personas, incluida Rocío.

El papel de Rocío era el de la exnovia de Mauricio, apareciendo solo en esta escena.

Cabe decir que, aunque Rocío solo ha ganado fama recientemente, sus años de experiencia interpretando roles secundarios y como actriz de fondo le permitieron actuar frente a Mauricio sin mostrar nerviosismo. Su actuación parecía particularmente natural y cómoda.

Ella sentía que Rocío podría avanzar más en el camino de la actuación.

Quizás en el futuro también podría convertirse en una actriz principal.

La escena transcurrió muy fluida.

Solo se regrabó dos veces, Rocío volvió a filmar dos estados diferentes según la solicitud del director, con Mauricio haciendo ajustes sutiles según el estado de Rocío.

Los ojos de Beatriz se iluminaron: —¿En serio?

—Sí. —La sonrisa en los ojos de Mauricio se intensificó.

—Qué maravilla, Mauricio, ser tu asistente es todo un privilegio. —Beatriz comenzó a alabarlo como de costumbre.

En ese momento, Rocío se acercó, saludando primero a Mauricio: —Hola, Mauricio.

La sonrisa en los ojos de Mauricio se atenuó, y al levantar la vista hacia Rocío, solo mostró una leve sonrisa, marcando un fuerte contraste de distanciamiento: —Hola.

Rocío se sorprendió ligeramente.

Había observado cómo Mauricio y Beatriz interactuaban antes, riendo y hablando. Mauricio miraba a Beatriz con ternura y sus ojos sonreían.

Pero al mirarla a ella, aunque parecía sonreír, la sonrisa no llegaba a sus ojos, transmitiendo una sensación de distancia.

Cuando Beatriz no estaba, y Mauricio hablaba con Bruno, tampoco parecía sonreír.

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