Em geral, gosto muito do gênero de histórias como Mi Pareja Tiene Dos Lobos, então leio muito o livro. Agora vem Capítulo 47 com muitos detalhes do livro. Não consigo parar de ler! Leia a história de Mi Pareja Tiene Dos Lobos Capítulo 47 hoje. ^^
La Perspectiva de Catherine
"Bueno, ¿has terminado? ¿Quieres ver a
los potrillos o no?". No quería discutir con Blake porque me iba a
trabajar pronto. Miré a Noah y a Hedwig.
Inmediatamente dejaron el cuchillo y el
tenedor. Luego saltaron de sus asientos y alegaron que estaban llenos.
"Vale, vamos a ver a los
potrillos". Blake los guió hacia la puerta.
Salimos de la villa junto al lago. En el
césped fuera de la villa, había dos hermosos potrillos.
Los dos potrillos, uno blanco y otro negro,
fueron sin duda seleccionados con cuidado. Su pelaje era muy brillante y comían
hierba con la cabeza gacha. Parecían muy lindos.
Hedwig y Noah olvidaron todas sus
preocupaciones y corrieron hacia los dos potrillos.
"Niños... ¡Cuidado!". Blake de
repente los persiguió como un loco.
"Papá, corre más rápido...".
Hedwig gritaba emocionada mientras corría.
Vestido de traje, Blake corrió hacia
Hedwig, sin conseguir mantener su peinado.
Los seguí detrás y los vi correr. De
repente, mi corazón se llenó de calidez. La escena era tan buena que quería
recordarla para siempre.
"Papá, ¿les has puesto nombre a los
potrillos? Son tan pequeños y monos". Se pararon junto a los potrillos con
sonrisas felices.
Hedwig extendió la mano para tocar al
potrillo, pero el potrillo levantó de repente la cabeza para mirarla. Se asustó
y retiró la mano.
Me adelanté y me puse en cuclillas para
coger la mano de Hedwig. "No tengas miedo. No harán daño a la gente. Son
amables".
Con mi ayuda, Hedwig consiguió acariciar la
cabeza del potrillo. Tenía el pelo liso y suave.
"Todavía no tienen nombre. Pueden
ayudarles a conseguir uno", dijo Blake con dulzura.
Noah había estado jugando con su potrillos.
Cogió un puñado de hierba y se lo llevó a la boca. El potrillo estiró la lengua
y se tragó la hierba.
Noah siguió arrancando la hierba con una
sonrisa de felicidad en la cara.
Hedwig ladeó la cabeza y se quedó
pensativa. Después de un rato, dijo seriamente: "Papá, ¿está bien llamarlo
Castaño? El potrillo de Noah puede llamarse Cacahuete".
Noah sacudió la cabeza, insatisfecho.
"Estúpida, no me importa que tu potrillo se llame Castaño. Pero el mío no
es Cacahuete. No va con su temperamento. Creo que debería llamarse Roca".
"Pero realmente creo que es un buen
nombre, Noah", insistió Hedwig.
Noah se comprometió y dijo: "De acuerdo,
será Cacahuete. No pelearé contigo".
Hedwig sonrió satisfecha.
"Papá, mira. ¡Se está comiendo la
hierba de mi mano!
"Papá, casi me muerde la mano.
"Papá, ¿cuándo podré montarlo?
"Papá... Castaño se escapó. Ayúdame a
perseguirlo...
"Papá, date prisa...".
Después de más de media hora, todavía se
negaban a irse. Revisé la hora y planeé ir a la compañía.
Tuve que persuadirlos pacientemente:
"Noah, Hedwig, es hora de ir a la escuela. No quiero que lleguen tarde al
segundo día. Podrían dar una mala impresión a los maestros."
"Mamá, quiero familiarizarme con
Castaño. ¿Puedes pedirle a papá que pida un día libre para mí?". Suplicó
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