Entrar Via

Mimada por el mafioso. romance Capítulo 4

La razón no la entendía, por más que analizó la situación en su mente, para Joseph no hubo más respuestas que solo lo que un ser egoísta podía hacer.

Pero las palabras del padre de Keyla aún le causaban esa fisura en su pecho, aún tenían un poder extraño que ella también percibió al verlo apretar los dedos en el volante.

Miró a la mujer a su lado y aunque claramente tenía algunas diferencias en su físico, era ella. Era la misma chica que le hacía problema por todo años atrás.

No, en realidad estaba más hermosa. Algo distinto pero no supo qué, solo que su belleza era mucha más. Su corazón se aceleró, pero había algo peligroso en ello que creyó extinto y ahora...

__ ¿Vamos a algún lado en especial? - se atrevió a preguntar, sacándolo de su ensimismamiento. Este aclaró su voz.

__ ¿Alguno que creas sea especial? - preguntó él.

__ No sé. Yo voy a los parques, son más...

__ Naturales. - completó Joseph por ella, la chica giró a verlo y no entendió cómo supo lo que diría. No podía leer mentes ¿verdad?...¿verdad?

__ Lo repetías todo el tiempo. - aclaró él.

Keyla quiso decir algo más, poder entender a qué se refería cuando le hablaba de un pasado donde convivieron, pero en su mente hubo un click, algo que la hizo llevarse la mano a la cabeza, algo que en lugar de ser un alivio fue un martirio.

__ ¿Que ocurre? - preguntó Joseph con preocupación.

__ Detente....por favor, detente. - pidió ella y Joseph no tardó en hacerlo dándole el tiempo de que ella saliera a un lado de la autopista, inhaló y exhaló como la psicóloga le enseñó.

Recordó lo que debía hacer, pero aún todo junto no ayudó.

Su cabeza dolía más, su pecho se movió con fuerza y sus labios temblaron al no poder decir lo que sentía. Sus piernas no la sostuvieron como debían y cuando se doblaron...

__ Keyla, mírame. - la voz ronca y firme de Joseph la dejaron sin respirar, a la vez que la sostuvo de los hombros para que no cayera - Estás teniendo una ataque de pánico. Pero mírame.

Ella obedeció, los ojos profundos de ese hombre la hicieron contener lo que en su pecho vibró.

__ Fíjate en lo que hago y repítelo. - la orden fue clara y en cada vez que él llenó sus pulmones de aire, ella también lo hizo. Sin despegar los ojos del desconocido, realizó cada acción que vio, hasta que sus latidos se normalizaron al punto de no sentir su pecho apretado.

Solo al verla bien Joseph la soltó, indicando que lo haría, dando un paso hacia atrás.

__ ¿Mejor? - preguntó y ella movió la cabeza en señal de afirmación. - Bien, tengo agua.

Vio la duda en si separarse de ella o no, sabía que podía intentar escapar de nuevo.

__ No me iré, no podría correr. - dijo ella con la voz entrecortada.

Él aún dudó, pero necesitaba verla bien por lo que fue por la botella con agua que le entregó sin tapa. Hidratar su garganta le fue de ayuda, sin embargo aún tenía muchas dudas y pensó que si se ponía a exponerlas frente a ese desconocido, entraría en otro ataque.

Capítulo 4 1

Verify captcha to read the content.VERIFYCAPTCHA_LABEL

Historial de lectura

No history.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Mimada por el mafioso.