Pero… ¿¡Eres un Millonario!? romance Capítulo 451

Natalia dejó de resistirse y dejó que Ricardo tomara el control.

Ricardo temía lastimarla y también temía despertar su propio deseo, así que después de darle un beso, soltó sus manos.

"Mañana tienes tu chequeo prenatal. Te acompañaré."

"Está bien."

...

Temprano la mañana.

Ricardo se levantó temprano, preparó un sándwich, luego ayudó a Natalia a vestirse y la sacó de casa.

Nacho los estaba esperando abajo. Cuando los vio bajar, intentó acercarse para ayudar a Natalia, pero se detuvo por la fría mirada de Ricardo.

Nacho retiró su mano, avergonzado.

Sr. Roldán, ¡no tienes que ser tan dramático!

Ricardo llevaba un táper de almuerzo en una mano y la de Natalia en la otra. Una vez en el coche, le abrochó el cinturón de seguridad: "Aún no has hecho tu chequeo prenatal, así que no comas por ahora. Preparé sándwiches, puedes comerlos después del chequeo."

Cuando Nacho se subió al coche, vio a unos periodistas escondidos.

"Sr. Roldán, Sra. Roldán, hay periodistas."

Ricardo frunció la ceja: "Salgamos por la puerta trasera."

Nacho inmediatamente giró el coche y salieron por la puerta trasera del complejo.

Había muchos periodistas también en la puerta trasera. Al parecer, estaban esperándolos específicamente.

Natalia, al ver a esos periodistas y recordar lo sucedido con Fabio Morales, se sintió inquieta: "Esta noche, volvamos a Villa del Lago."

Este lugar es bueno, pero la seguridad es insuficiente.

Si estas personas se meten, no puede asumir la responsabilidad.

Ricardo no esperaba que ella propusiera mudarse de vuelta a Villa del Lago, así que inmediatamente accedió.

"Haré que Brisa se vaya."

Para evitar que se repita lo sucedido anteriormente.

"No es necesario." Natalia negó con la cabeza: "A la abuela le gusta. Está bien si se queda."

Brisa siempre había sido inquieta. Mejor tenerla vigilada.

Ricardo tomó su mano: "Está bien."

Graciela conoce el carácter de Natalia. Así la tranquilizó.

Brisa fingió estar avergonzada. Después de un rato, finalmente dijo: "Entonces está bien."

Graciela se alegró al ver que estaba dispuesta a quedarse.

Sonó el motor del coche.

Graciela se levantó y dijo: "Llegaron ya."

Hubo un destello de preocupación en los ojos de Brisa, "¿Deberíamos salir a recibirlos?"

No es de extrañar que a Graciela le guste Brisa. Realmente es inteligente.

"Está bien."

Tan pronto como salieron por la puerta, vieron un auto negro estacionado afuera de la puerta.

La puerta del coche se abrió. Ricardo ayudó a Natalia a bajar del coche. Sus ojos estaban llenos de ternura, como si solo pudiera ver a Natalia. Caminaban despacio.

Después de despedirse de ellos, Nacho se fue en su coche.

Entraron al patio y vieron que Graciela ya había salido. Ricardo la saludó.