Secreto de mi esposo ciego romance Capítulo 32

Los labios de Dámaso se curvaron en una sonrisa al ver su expresión tonta y bobalicona.

—Puedes devolver el favor de forma similar.

—¿Cómo?

—Puedes darme un hijo.

Camila se quedó boquiabierta.

…

Aunque Camila había evitado ayer que Erica la emboscara en la puerta del colegio gracias a la advertencia de Luci, la noticia de que Camila estaba con un ricachón se extendió por todo el campus al día siguiente. Cristalina Luna expuso públicamente la especialidad y el año de la chica en el post en línea. Camila era la única estudiante del campo en su especialidad y curso.

Un alumno aficionado a los chismes comparó la situación de Camila con la de la alumna que se preveía en el post y confirmó que Camila era la chica mencionada en el post. Camila tenía clases la tarde siguiente. La gente señalaba a Camila y hablaba de ella en cuanto entraba en la sala de conferencias.

—Parece tan recatada. Nunca pensé que sería tan desaliñada.

—Eso es lo que yo decía. ¿Cómo puede Camila permitirse estudiar en nuestra escuela con sus condiciones familiares? Resulta que tiene un banquero detrás.

—Qué humillante para nuestro año. Los alumnos de otras escuelas se ríen de mí y dicen que hay una desvergonzada en nuestro año.

El grupo de estudiantes discutía abiertamente sobre Camila. Cristal, que ese día había presenciado cómo Camila entraba en el auto de Dámaso, dirigía la conversación.

Cristal miró a Camila por el rabillo del ojo cuando ésta entró.

—Nuestra compañera de clase que está con un viejo rico, ¿tienes algo que decir a tu favor?

Camila arrugó las cejas.

—¿Cómo sabes que estoy con un viejo rico?

—¿A que sí? ¿Alguien que conduce un Maserati se metería en una relación corriente con una pueblerina como tú? —se burló Cristal—. Como mucho, es alguien mayor que quiere algo diferente. El viejo rico sólo te mantendrá un tiempo. ¡Quizá la persona que te mantiene es un viejo feo, gordo y calvo!

Verifica el captcha para leer el contenidoVerificar