—no puedo creer que estés aquí después de todo lo que le as hecho —escupió mi hermano con rabia.
—ella me necesita y lo sabes —podía reconocer esa voz en cualquier lugar, Leroy.
Escuche pasos que se acercaban más y más pero después todo fue un silencio.
—no te queremos cerca de ella —Ivonne hablo segura.
—saben que no pueden impedirlo, ella es mi luna —Leroy se controlaba en sus palabras.
—¿te atreves a decirle luna? Después de lo que pasó —dijo Dax entre dientes
Mi cuerpo se sentía muy pesado y no podía hacer ningún tipo de movimiento.
—vine por mi luna y no me iré sin ella, les recuerdo quien soy yo y de lo que soy capaz —dije el con su voz ronca.
Mi madre soltó un suspiro y escuche sus pasos acercarse hacia mí y tomó mi mano con delicadeza.
—Amelie es como una hija para mí Leroy y lo sabes, ¿no? —pregunto ella en hilo de voz.
—si lose —respondió.
—le as hecho mucho daño y es algo que nadie de aquí te va perdonar pero sin embargo, es cierto que son almas gemelas y no podemos impedirlo, Alek esta cada vez más cerca de atacar y no podemos lidiar con dos problemas ala ves, puedes quedarte con Amelie en este lugar si es lo que deseas —hablo mi madre acariciando mi mejía.
Quise decirle a mi madre gracias, por todo lo que había soportado por mi pero no podía decir ni una sola palabra.
La oscuridad se expandía en mi mente nublando mis pensamientos, pequeños susurros se escuchaban por todos lados pero todo estaba oscuro y no sabía de dónde provenían esas voces.
—asesina, eres una loba muy peligrosa.
—déjate llevar por tu loba interior.
Mi loba Esmee me miraba aterrada mientras agachaba su cabeza hacia mi, se acomodo entre mis manos y paso su lengua por todo mi brazo mientras gemia silenciosamente.
—no Amelie, yo no soy peligrosa, no quiero asesinar... —gemia con miedo.
Acaricie su pelaje brillante y le sonríe con ternura.
—no te preocupes todo va estar bien —susurre en su oreja.
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: Secreto.