Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 1046

“Fern tuvo un accidente. Me gustaría ver cómo sigue”. Sharon no pudo evitar preocuparse cuando escuchó que Fern se había caído de un caballo.

"¿Acaso quieres matar de hambre a mi hijo?". Simon levantó las cejas ligeramente. Ella fue la que dijo que tenía hambre en un principio.

Sharon tosió suavemente y dijo: “Iré a ver qué está pasando primero. Comeré más tarde. No mataré de hambre al bebé”.

Simon sabía que no había nada que pudiera detenerla, ya que su atención estaba en la situación de Fern. Por el momento, solo Eugene y el asistente de Fern estaban frente a la puerta de la sala de emergencias.

“Hermano, ¿qué pasó? ¿Creí que tomaban muchas precauciones con este tipo de escenas? ¿Cómo se cayó?”, preguntó Sharon mientras miraba la luz sobre la sala de emergencias. Quería saber más sobre la situación.

Eugene estaba sentado en el banco, con una mano pellizcando el espacio entre sus cejas. Parecía muy preocupado. Tal vez la herida de Fern era tan grave que no estaba de humor para hablar en ese momento.

Layla respondió en su lugar: “Tampoco estamos seguros de lo que sucedió. El caballo de Fern se volvió loco de repente y la tiró. Ella trató de montarlo ayer y el caballo estaba de buen humor. Todo salió bien. Sin embargo, durante la filmación de hoy, el accidente ocurrió tan pronto se subió al caballo y comenzó a montarlo para dar una vuelta. Nadie se lo esperaba… El equipo de filmación ya está investigando la causa del accidente”.

Luego de que dijo eso, Wyatt se apresuró a informarle a Eugene de otra situación. "Presidente Eugene, hay muchos reporteros afuera del hospital preguntando sobre la lesión de la señorita Fern".

Los ojos de fénix de Eugene se llenaron de frialdad en un instante, y su voz sonó escalofriante. “Haz que el hospital envíe a todos los guardias de seguridad a desalojarlos. ¡No dejen entrar a ningún reportero!”. Eugene siempre se había opuesto a que Fern se dedicara a la actuación, y tras su accidente, era realmente molesto ver a esos reporteros acosándolos persistentemente como moscas. “Si los guardias de seguridad del hospital no son suficientes, ¡envíen a más personas!”, ordenó Eugene.

"Sí, me encargaré de eso de inmediato". Wyatt se fue a toda prisa.

“Parece que no hay nada que puedas hacer aquí. Ven conmigo, vamos a comer primero. No dejes que el bebé muera de hambre en tu barriga”, dijo Simon de repente.