Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 1067

Resumo de Capítulo 1067: Ten cuidado, mi papá CEO

Resumo de Capítulo 1067 – Uma virada em Ten cuidado, mi papá CEO de Internet

Capítulo 1067 mergulha o leitor em uma jornada emocional dentro do universo de Ten cuidado, mi papá CEO, escrito por Internet. Com traços marcantes da literatura Amor, este capítulo oferece um equilíbrio entre sentimento, tensão e revelações. Ideal para quem busca profundidade narrativa e conexões humanas reais.

Claude miró a Sebastian. Este chico le había dicho a Candace que estaba allí. Candace estaba agarrando un termo que debía de estar lleno de sopa de pollo.

“¿Ya han mejorado tus heridas?”, preguntó Candace mientras le miraba fijamente el brazo.

“Estoy bien. Gracias por preocuparte”, dijo Claude. Él no estaba acostumbrado a que otras personas se preocuparan por él.

Candace sonrió amablemente y dijo: “Perdiste mucha sangre cuando te lastimaste, por eso te preparé un poco de sopa de pollo. Deberías beber un poco”.

Claude siempre había tenido un físico fuerte, por lo que no creía que necesitara beber sopa de pollo, pero no le pareció buena idea rechazarla de inmediato. Sebastian le dio un codazo al ver lo nervioso que estaba delante de Candace.

“Tío Claude, toma un poco de la sopa. La señorita White te la preparó especialmente para ti. No dejes que su esfuerzo sea en vano”.

La expresión de Claude se puso rígida. Con mucha dificultad, se obligó a decir: “De acuerdo”.

“¿Por qué no llevas a la señorita White a la casa para que tome asiento?”.

Sebastian volvió a hacerle un amable recordatorio. Claude miró a Rue y a Sebastian con preocupación. Luego le recordó a Sebastian: “No permitas que la señorita Rue se acerque a esa zona...”.

“Lo sé, lo sé. No seas tan regañón. Lleva a la señorita White dentro de una vez”.

Sebastian intentó echarlo mientras lo empujaba. Candace le sonrió a Sebastian y le preguntó: “¿Quieren tomar un poco de sopa de pollo también?”.

“No, gracias. Preparaste la sopa para el tío Claude. Los niños como nosotros no necesitamos esos suplementos”. Sebastian rechazó su oferta cortésmente.

“Entonces vamos”.

Candace extendió su mano para tirar del brazo de Claude. Su suave mano tocó los firmes músculos de Claude, lo cual provocó una sacudida de electricidad en el brazo de este y le hizo retirar el brazo de inmediato. Esto hizo que se pusiera aún más nervioso.

“Después... Después de ti”, dijo él.

A Candace le divertía verle reaccionar así. Parecía que Sebastian tenía razón; él nunca había tenido ninguna novia y tampoco tenía ninguna mujer a su lado. De lo contrario, no estaría tan nervioso.

Después de echar a Claude y a la señorita White, Sebastian se volteó inmediatamente y le preguntó a Rue: “¿No dijiste que querías tocar una pistola de verdad?”.

Rue asintió. Ella realmente quería tocar una pistola.

Rue asintió.

“Sé qué hacer ahora”.

“Muy bien, deberías disparar un tiro por tu cuenta”.

Sebastian confiaba en las habilidades de Rue.

Rue agarró el arma con fuerza en sus manos. Ella no sabía por qué su corazón se aceleraba. Su corazón latía tan rápido que su respiración también se volvió errática. Aunque su condición cardíaca se había curado en su mayor parte, de vez en cuando se desencadenaba, especialmente cuando se encontraba con algo emocionante...

Sebastian se dio cuenta del extraño comportamiento de la pequeña y quería acercarse a preguntarle qué le pasaba. De repente, un fuerte sonido resonó en el aire. Ella había disparado.

“Ah...”, gritó ella con sorpresa.

“¡Rue!”, gritó Sebastian mientras su expresión cambiaba inmediatamente.

Histórico de leitura

No history.

Comentários

Os comentários dos leitores sobre o romance: Ten cuidado, mi papá CEO