Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 1286

Resumo de Capítulo 1286: Ten cuidado, mi papá CEO

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Fern estaba siendo perseguida por los reporteros. Lena la protegió, y las dos salieron rápidamente del lugar.

Cuando llegaron a la entrada del hotel, Lena trató de parar un taxi, pero ya había gente en el vehículo.

Los reporteros detrás de ellos estaban a punto de alcanzarlos cuando un Maserati negro pasó repentinamente y se detuvo frente a ellos.

Cuando la ventanilla del coche bajó, vieron que la persona en el coche era Eugene. "Entra", le dijo a Fern con una sonrisa.

Fern se sorprendió al verlo y no quiso subirse a su coche.

Sin embargo, Lena la empujó apresuradamente hacia el coche. "¡Fern, entra! Distraeré a los reporteros".

El sonido de los pasos se acercaba cada vez más. Fern y Eugene se miraron. Después de un momento, ella terminó subiéndose al coche del hombre. No quería estar rodeada de reporteros.

El Maserati de Eugene se alejó antes de que los reporteros lograran alcanzarla.

Fern vio por el espejo retrovisor que algunos de ellos estaban tratando de perseguir el coche, mientras que otros se montaron en sus coches para perseguirlos.

"Pierde a las personas siguiéndonos", le dijo Eugene al chofer.

"Sí, señor". El conductor recibió la orden y luego aceleró. Después de saltarse un semáforo en rojo, perdieron de vista a todos los coches que los perseguían.

Después de asegurarse de que ya no los seguían, Fern respiró aliviada.

"¿Por qué hiciste tanto alboroto?". La voz de Eugene la tomó por sorpresa.

Se dio la vuelta para verlo y sintió que él la miraba con una expresión burlona.

"¿Qué hacías allí?". No había forma de que estuviera pasando por allí por casualidad.

Se había preparado para lo peor, pero lo que hizo Eugene estaba más allá de su imaginación más salvaje. Nunca se imaginó que Eugene usaría su enorme capital para entorpecer todo lo que querían hacer.

"Está bien, entiendo". Fern colgó el teléfono. Su expresión había cambiado hacía mucho tiempo. Cuando volvió a mirar a Eugene, solo había frialdad e ira en sus ojos. "¡Así que fuiste tú!".

Eugene levantó las cejas, pero no abrió la boca. ¿Qué había descubierto? ¿Por qué estaba tan enojada de repente?

“Buscaste la forma de convertirte en el accionista mayoritario de Entretenimiento Darcy y diste la orden de que Jeremy no podía firmar un contrato conmigo, ¿no?", cuestionó ella.

Eugene asintió. "Así es". ¡No tenía vergüenza de admitirlo!

La ira nubló inmediatamente la cabeza de Fern. Ella apretó el puño, tratando de resistir el impulso de abofetearlo.

"¿Qué hay del alborotador que subió al escenario? Expuso todo sobre mí y arruinó todo el evento... Tú también estuviste detrás de eso, ¿verdad?".

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