Resumo de Capítulo 1383 – Capítulo essencial de Ten cuidado, mi papá CEO por Internet
O capítulo Capítulo 1383 é um dos momentos mais intensos da obra Ten cuidado, mi papá CEO, escrita por Internet. Com elementos marcantes do gênero Amor, esta parte da história revela conflitos profundos, revelações impactantes e mudanças decisivas nos personagens. Uma leitura imperdível para quem acompanha a trama.
La respiración del Viejo Amo se tornó errática mientras las venas de su frente sobresalían. Lo fulminó con la mirada y le dijo: "Bien, no te obligaré. Enviaré a algunos hombres para que acaben con su vida. Creo que no cometerás más errores en el futuro sin que ella te influya".
El corazón de Eugene se estremeció después de escuchar las palabras del anciano. "¡Abuelo!" ¿El Viejo Amo quería quitarle la vida a Fern?
"¡Abuelo, no puedes hacer eso!". Eugene comenzó a sentir pánico.
Quinn cerró los ojos y se negó a mirarlo. "Déjalo. Puedes decidir no casarte con Sydney, así que yo también puedo decidir hacer desaparecer a esa mujer de este mundo".
Eugene cerró los puños mientras preguntaba: "¿Me estás amenazando con su vida?".
Quinn fingió no escuchar la pregunta de su nieto. Cerró los ojos y permaneció en silencio.
"¡Abuelo!", gritó Eugene con preocupación. Sin embargo, el Viejo Amo no le respondió.
Comprendió las intenciones de su abuelo. Podía elegir entre casarse con Sydney o dejar que su abuelo matara a Fern.
"¿No hay lugar para la negociación?", le preguntó a su abuelo mientras lo miraba.
Quinn permaneció en silencio.
Eugene sabía que el Viejo Amo siempre había sido inflexible en sus decisiones. Si le decía que haría desaparecer a Fern de la faz de la tierra, no cabía duda de que le ordenaría a sus hombres que lo hicieran.
Por supuesto, no podía ver cómo Fern perdía la vida cuando era inocente.
Sydney se quedó sorprendida. Lo miró incrédula y preguntó: "¿Qué has dicho?".
"Casémonos esta semana", dijo él mientras la miraba a los ojos.
Sydney estaba aturdida. No podía decir si se sentía muy contenta en ese momento. ¿Dijo que quería casarse con ella?
"¿Qué…? ¿Por qué?". Temía estar soñando.
"Te dije que me haría responsable de ti", dijo Eugene con calma.
Quizás la sorpresa hizo que Sydney no prestara atención a la expresión del rostro del hombre, por lo que pensó que él quería casarse con ella sinceramente. Bajó la cabeza y en su rostro se dibujó una expresión de timidez. "Haré lo que dices. Te escucharé".
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