Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 1454

Sharon iba al laboratorio todos los días para formular nuevas fragancias. Ella se sorprendió cuando Sydney apareció en el laboratorio.

Ella se encontró con Sydney, quien llevaba tiempo esperándola, en su oficina.

“Sydney, ¿por qué estás aquí? No has venido a pedirme que te formule un perfume, ¿verdad?”. Ella se rio entre dientes mientras se acercaba.

Sydney se levantó al verla. “Estoy aquí para pedirte ayuda”.

A Sharon le pareció extraño. ¿En qué podía ayudarla?

“Somos familia. No tienes que pedirme ayuda. Siéntate, vamos a hablar”.

Aunque ella siempre había querido que Fern fuera su cuñada, habían pasado muchos años, y Eugene y Sydney ya estaban casados. Por lo tanto, su deseo nunca se cumpliría. Además, Sydney siempre había tratado a Eugene con sinceridad. Como su hermana, ella estaba dispuesta a reconocer a Sydney como su cuñada.

Sydney se sentó, jugó con sus manos y bajó la cabeza. Parecía que le estaba costando sacar el tema a colación.

Sharon le sirvió una taza de té y le dijo: “Cuéntamelo todo despacio”. Parecía que las cosas eran serias. De lo contrario, Sydney no tendría esa expresión en la cara.

Sydney respiró profundamente y dijo: “Hace unos días, tuve una discusión con Eugene. Desde entonces, él ha estado durmiendo en su oficina. No ha vuelto a casa desde hace una semana...”.

Sharon quedó extremadamente sorprendida después de escuchar lo que dijo. “¿Ambos tuvieron una discusión?”. Ella se dio cuenta de que había hablado precipitadamente y añadió de inmediato: “¿No han estado siempre los dos en buenos términos? ¿Por qué han discutido?”.

Según lo que ella sabía, ambos se habían llevado muy bien después de casarse. Nunca habían discutido entre ellos y su relación era siempre pacífica.

Era difícil imaginar que ambos tuvieran una discusión.

“Yo... es una larga historia. Todo es mi culpa. Yo quiero un bebé, pero Eugene no tiene intenciones de tenerlo. Por eso discutimos”. Sydney no se atrevió a decirle que ella y su madre habían drogado a Eugene.

Después de escuchar lo que dijo, Sharon pudo entender por qué habían empezado a discutir.

“En realidad, él...”. Ella quería decirle que Eugene no era apto para tener bebés, y lo mismo le ocurría a ella. Ella también había pensado en abortar a su hija cuando estaba embarazada en aquel entonces.

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