Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 1642

Quincy miró a Renee, quien se reía a carcajadas. Su cabello y su largo vestido ondeaban con la brisa nocturna, lo que la hacía parecer aún más encantadora y seductora. Su sonrisa era radiante y sus ojos brillaban con fuerza. Desprendía un aura de confianza.

Alguien así hacía que los demás tuvieran ganas de acercarse a ella, especialmente alguien como Quincy, cuyo corazón se había llenado de oscuridad hacía mucho tiempo debido al trauma que sufrió.

Renee era como un encantador girasol. Quincy quiso acercarse a ella para obtener un poco de su calor, pero no se atrevió a hacerlo.

"Hermana Quincy, mi padre siempre menciona que eres extremadamente hábil en los negocios. No hay trato que no consigas ganar. Yo también quiero aprender de ti. ¿Estarías dispuesta a enseñarme?". Renee le contó sus pensamientos.

Quincy se sintió ligeramente sorprendida. "¿Quieres aprender sobre cómo llevar un negocio?".

Renee asintió, y luego negó con la cabeza. "La verdad es que no. Para ser sincera, ahora mismo estoy dirigiendo un bar. El negocio... La mayoría de esos hombres están ahí por mí, así que lo encuentro bastante insignificante. ¿Qué debo hacer para evitar que esto ocurra?".

Después de escuchar lo que dijo, Quincy la cuestionó: "¿Por qué quieres evitar que esto suceda? ¿No es eso bastante bueno? Eres la mejor marca para tu negocio. Mientras estés ahí, a tu negocio le irá bien".

Renee reflexionó sobre ello y pensó que era una forma razonable de plantearse las cosas. "¿Entonces no tengo que hacer ningún cambio?".

"Por supuesto que no. Solo depende de cuánto quieras ampliar tu bar".

"Cuanto más se expanda, mejor. Quiero que se convierta en el bar más popular".

"Si ese es el caso... tienes que ser paciente. No puedes lograrlo en un solo paso. Si necesitas algo, puedo ayudarte".

"¿De verdad? ¿Estás dispuesta a ayudarme? ¿Me convertirás en tu aprendiz?", preguntó Renee. Entonces procedió a arrodillarse frente a ella para dirigirse a Quincy como su maestra.

Quincy la detuvo inmediatamente. "Está bien. Las dos podemos llevarnos bien. Podemos ser hermanas".

Renee la tomó del brazo con pasión. "Te llamaré hermana Quincy a partir de hoy. No cambiaré más la forma de dirigirme a ti".

"¿No me llamaste así desde el principio?". Ambas se miraron y sonrieron.

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