Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 1694

Quincy entró en el despacho del presidente con su asistente. Ese lugar perteneció una vez a los Lane.

En aquel entonces, ella todavía era la Joven Señorita de la familia Lane. Su padre dirigía la empresa. Ella iba a visitarlo de vez en cuando.

Incluso le había dicho a su padre que le ayudaría a dirigir la empresa en el futuro.

Su padre se compadecía de ella por tener que dirigir una empresa tan grande siendo mujer. Había querido ayudarla a buscar un esposo que supiera gestionar la empresa. Así, ella no tendría una vida tan difícil.

Nadie hubiera esperado que todo lo que poseía su familia fuera a parar a manos de ese bastardo desalmado, Dayton Night, antes de que su padre lograra ayudarla a encontrar un hombre así o antes de que ella lograra hacerse cargo de la corporación de su padre.

Esa oficina tenía un aspecto diferente al que ella recordaba en el pasado. Después de que Dayton se hiciera cargo de la empresa, se convirtió en su despacho. El diseño de temática oscura de la oficina le sentaba bien.

Sin embargo, se enfadó cuando vio que todo lo que antes poseía su familia era suyo en ese momento.

No se podía ver a Dayton en ningún lugar de la gran oficina. Ella frunció el ceño. Habían acordado reunirse ese día. ¿Por qué no estaba presente?

"¿Dayton Night?", gritó.

Nadie le contestó. Incluso su secretaria no aparecía por ningún lado.

Su oficina no debería estar tan tranquila y desierta, ¿verdad?

"Dayton Night, ¿dónde estás? No me juegues una mala pasada". Ella entró en la oficina y trató de buscarlo.

Justo cuando estaba a punto de entrar en el salón, escuchó un ruido procedente del interior. Se acercó de inmediato. "Dayton Night, ¿estás dentro?", preguntó a través de la puerta.

Un fuerte estruendo sonó cuando la puerta frente a ella se abrió. Pensó que él saldría, pero el hombre se limitó a extender una mano fuera de la puerta y la atrajo hacia el interior de inmediato.

Un fuerte golpe resonó en el aire cuando la puerta volvió a cerrarse.

El corazón de Quincy dio un vuelco. Instintivamente intentó atacarlo, pero él fue más rápido que ella. Le sujetó la muñeca y se la retorció por la espalda.

Su alta y robusta figura se situó frente a ella mientras la atrapaba. Ella no podía moverse en absoluto.

¡Lo peor era que la parte superior de su cuerpo estaba desnuda!

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