Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 216

Leia Ten cuidado, mi papá CEO Capítulo 216 - o melhor mangá de 2020

Das histórias de Internet que li, talvez a mais impressionante seja Ten cuidado, mi papá CEO. A história é boa demais, me deixando com muitas expectativas. Atualmente, o mangá foi traduzido para Capítulo 216. Vamos agora ler a história Ten cuidado, mi papá CEO do autor Internet aqui.

“Disculpe, no le estoy respondiendo. Solo me estoy defendiendo. ¿No puedo hacer eso cuando me han acusado falsamente?”.

Penelope no esperaba que Sharon fuera tan grosera. Miró a Simon y dijo de manera indignada: “Mira, esta es la mujer con la que decidiste casarte. ¡Ella realmente le falta mucho el respeto a sus mayores!”.

“Vicepresidenta Zachary, ¿no acaba de decir que no puedo llamarla hermana? No eres mi mayor entonces”, dijo Sharon, divertida por la reacción de la mujer.

“De verdad que sabes cómo hacer enojar a las personas”, reprendió Penelope con frialdad.

“Suficiente, dejen de discutir”. Simon finalmente intervino y las detuvo. Había una sonrisa imperceptible en sus ojos mientras miraba a Sharon. No esperaba que Sharon no solo no le tuviera miedo a su hermana mayor, sino que incluso pudiera hacerla enojar tanto.

Su hermana mayor tenía razón. Esta mujer sabía cómo criticar y no tenía conciencia.

A pesar de eso, él cayó bajo su hechizo y no pudo evitar complacerla.

“Penelope, ¿por qué eres tan calculadora con una mujer que es indigna y no tiene modales?”. El tono de Simon seguía siendo tenue, pero sus ojos mostraban lo irónica que era esta situación.

Sharon fulminó a Simon con la mirada. No le importaba que no la ayudara, pero ¿por qué dijo deliberadamente esas palabras?

Penelope también sintió que había perdido la compostura. Él tenía razón. ¿Por qué se molestaba con Sharon? Esa mujer no era digna de su atención.

“Franky, ¿por qué estás aquí?”. Penelope se volteó hacia Franky.

“Tengo algo que informarle al presidente Zachary”, respondió Franky.

Penelope frunció el ceño. “Él necesita recuperarse ahora. No lo molestes con asuntos laborales por el momento”.

“Penelope, no estoy tan débil. No tendré problemas mirando algunos documentos”, dijo Simon.

“Simon…”.

“Penelope, ¿no dijiste que hay una reunión de la junta a la que debes asistir? Ya es casi la hora, así que deberías volver a la oficina”, la interrumpió Simon.

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