Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 243

Resumo de Capítulo 243: Ten cuidado, mi papá CEO

Resumo de Capítulo 243 – Uma virada em Ten cuidado, mi papá CEO de Internet

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Douglas se sentó en el sofá principal y Penelope estaba sentada a su lado.

Howard se sentó a un lado mientras Sally iba a cambiarse de ropa.

Simon estaba sentado solo cuando el mayordomo había llevado a Sebastian a la habitación.

Las personas que estaban de pie eran Sharon, Sheryl y Fiona.

"Adelante, cuéntame qué pasó". Los ojos de Douglas estaban fijos en Sheryl.

"Papá, no la escuches...". Fiona trató de detenerlo ansiosamente, pero Douglas había tomado la decisión de escuchar la historia.

Él la interrumpió inmediatamente: "Cállate".

Fiona miró a Sharon y a Sheryl con amargura, frunciendo el ceño. "Si ustedes dos dicen alguna tontería, ¡nunca las perdonaré!".

Sharon no temía en absoluto la amenaza de Fiona y le dio unas palmaditas suaves a la mano de Sheryl. Ella susurró: "Puedes empezar".

Sheryl intercambió miradas con ella y alivió sus emociones. Ella dijo: "En realidad... el accidente automovilístico de Silas no fue en absoluto un accidente. Ocurrió porque alguien había saboteado su coche, lo que provocó un mal funcionamiento de los frenos y, por lo tanto, provocó un accidente".

Los Zacharis se quedaron atónitos al escuchar sus palabras, especialmente Douglas. El anciano que había pasado por innumerables vicisitudes en la vida no pudo calmarse en ese momento. Su respiración se aceleró cuando sus ojos oscuros se fijaron en Sheryl.

"¡Eso es absurdo!", gritó el Viejo Amo con indignación. Su mano envejecida se apretó sobre el bastón de dragón que tenía en la mano, y las venas verdes de su frente palpitaban levemente.

Las palabras de Sheryl asustaron a Fiona, pero la ira del anciano la hizo reaccionar. Ella entró en pánico y agregó enojada: "¡Sí, lo que estás diciendo es completamente absurdo! El accidente de coche de Silas nos ha causado bastante dolor. Ahora vienes aquí para reabrir nuestras cicatrices. ¿Vas a poder tener la conciencia tranquila después de esto?".

Parecía que había obtenido la respuesta a su pregunta.

Ella bajó la cabeza y sonrió burlonamente para sí misma. Ella llegó a pensar que él estaría a su lado y castigaría a la asesina que mató a su hermano mayor.

Antes de ir a la fiesta de ese día, ella había prometido hacer que Fiona obtuviera su merecido. Por lo tanto, ella no se detendría a escucharlo.

Ella lo miró, frunciendo levemente los labios mientras decía sin prisa: "La persona que manipuló el coche de tu hermano en ese entonces no fue otra que tu cuñada. ¡Fue Fiona!”. Ella se volteó para mirar a Fiona, quien tenía una expresión de pánico en el rostro.

"¡Sharon!". Simon resopló con frialdad. Su atractivo rostro parecía tenso, y todo su cuerpo exudaba un escalofrío aterrador.

¿En qué estaba pensando esta mujer? ¿Por qué ella no lo escucharía?

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