Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 369

"¡Está bien, entonces le quitaré la vida!". Cuatro apretó el gatillo del arma que apuntaba a Joey.

"¡Espera!". Sonó una voz femenina fría pero decidida.

Todos miraron hacia arriba solo para ver a la anciana Gabriel entrando con la ayuda de alguien.

Summer se acercó apresuradamente a ella y dijo: "Abuela, ¿por qué estás aquí?".

La abuela estaba mal de salud, por lo que la dejaron descansar en la casa. Habían planeado esperar hasta la recepción de la boda para dejarla aparecer y pronunciar unas palabras.

La anciana Gabriel le dio unas palmaditas en la mano a Summer y la tranquilizó diciéndole: "No te preocupes, Summer. Con la abuela cerca, nadie podrá quitarte tu derecho a la herencia".

Los ojos de Cuatro adquirieron una mirada sombría, y el odio en ellos se intensificó.

"Cuatro, no deberías estar aquí. Baja el arma y deja ir al niño", dijo la anciana Gabriel sin prisa.

Las personas presentes estaban confundidas. ‘¿Cómo es que una boda perfectamente buena se convirtió en un drama de televisión con la familia Gabriel luchando por una herencia?’.

Sharon miró a Simon, quien estaba en el esmoquin de novio, y notó que todavía estaba de pie junto a Summer. ‘¿Él sabía que esto iba a suceder en la boda?’.

Estaba preocupada porque toda la familia Gabriel tenía armas. Era demasiado peligroso en ese lugar. Con este pensamiento, finalmente entendió por qué Simon quería que se fuera.

Sin embargo, nadie podía irse en estas circunstancias.

Cuando ella miró a Simon, él movió los ojos en su dirección de repente y sus miradas se encontraron la una a la otra. Por un momento, pareció haber miles de palabras que no podían decirse.

"Sí, siempre lo he sabido, así que hoy es mi oportunidad de vengarme de la familia Gabriel. ¡Me lo debes!". Apenas dijo eso, Cuatro apuntó con su arma a la anciana Gabriel.

Summer se sorprendió e, inconscientemente, quiso saltar frente a su abuela, pero el sonido de los disparos ya había sonado...

¡Ah!

Hubo un momento de caos mientras la gente gritaba, pero nadie podía salir del lugar, así que solo podían esconderse debajo de los bancos.

La anciana Gabriel estaba parada no muy lejos de Sharon. Ella vio caer a la anciana, que tenía los ojos bien abiertos, mientras la sangre brotaba de su corazón. Murió de forma lamentable, con muchos lamentos en su corazón...

Sharon se agachó con la cabeza entre las manos, y el horror se apoderó de su corazón. 'Simon... ¿Podría él estar en peligro también?'.