Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 536

Todos se sorprendieron cuando Fern tomó las tijeras de la mesa. Pensaron que ella quería vengarse de Hera por ira.

No esperaban que ella usara las tijeras para cortar su vestido. En un abrir y cerrar de ojos, se había cortado la parte del vestido que tenía la mancha de café.

Su vestido se transformó en un vestido con aberturas laterales, que reveló una de sus piernas largas, esbeltas y claras. ¡Emitía una fascinante sensación de sensualidad!

Todos quedaron con la boca abierta. ¡Qué mujer tan atrevida!

Eugene miró fijamente la pierna expuesta de Fern. Su mirada se ensombreció mientras su expresión se endurecía.

Fern se volteó para mirar a Sharon. "¿Puedo participar en la audición de esta manera?", preguntó ella.

Una pizca de admiración cruzó la mirada de Sharon después de ver lo que Fern había hecho. No entró en pánico ante el peligro inminente y logró resolver sus problemas en tan poco tiempo. Su cariño por la señorita Thompson siguió creciendo.

"Sí, puedes", respondió Sharon.

Ella miró a Eugene, solo para ver que tenía una expresión fría y rígida en su rostro. Tenía el ceño fruncido con fuerza. Parecía indiferente, pero actuaba de manera diferente a como solía hacerlo.

Esto significaba que todavía se preocupaba por Fern.

Hera estaba más que enfurecida por toda la situación. Tenía la intención de aprovechar esta oportunidad para ahuyentar a esa humilde sirvienta. ¡No esperaba que se quedara de una manera tan obstinada!

“Tu vestido está roto. ¡Si subes al escenario de esa manera, sería una falta de respeto a los jueces y al público!", dijo Hera con una fría mueca de desprecio en su rostro.

“La señorita Newton ya dijo que puedo seguir participando en la audición. Además, no es como si estuviera usando algo extraño. ¿Cómo es una falta de respeto?", la interrogó Fern con un tono poco entusiasta.

Una expresión desagradable apareció en el rostro de Hera. ¡¿Cómo se atrevía esa mesera a contestarle?!

"Ya es suficiente. La audición comenzará pronto. Si tienen tiempo libre, deberían prepararse. Dejemos de reunirnos aquí y dispersense", les dijo Sharon. No quería que Hera estropeara todo el evento.

Todas comenzaron a realizar sus propios preparativos. Fern bajó la cabeza, se dio la vuelta y se dirigió al baño.

Las cejas de Eugene se fruncieron en un ceño tenso. La sonrisa en el rostro de la mujer no llegó a sus ojos. Era desagradable a la vista.

Fern continuó hablando, ya que él no le respondió. "Si ese es el caso, no tienes que preocuparte. Solo participo en la audición porque quiero obtener el premio. Después de todo, tu hermana es bastante generosa con los premios. Incluso si no me seleccionan como embajadora, recibiré un premio en efectivo", dijo.

Las pupilas de Eugene se dilataron. La mirada que él había puesto en ella se volvió más fría y aguda. ¡Una vez más, lo estaba haciendo por dinero!

"Si tienes tan poco dinero, ¿por qué no aceptaste el cheque que te ofrecí antes?", le preguntó él en voz baja.

Fern se congeló momentáneamente antes de estallar en carcajadas. Ella se inclinó por reírse demasiado fuerte...

"¿De qué te ríes?", preguntó Eugene en un tono irritado. Tenía una expresión rígida plasmada en su rostro.

Fern detuvo su risa con cierta dificultad. Las lágrimas casi corrían por su rostro por la fuerza de su risa. “Eugene Newton, ¿debo aceptar tu cheque si me lo ofreces? ¿Quién crees que eres? ¿Eres el salvador del mundo?", preguntó ella con palabras mordaces y llenas de sarcasmo.