Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 59

'¡Es Sharon, todo es culpa de Sharon! ¡Si no fuera por ella yo no estaría así!'.

De repente, alguien empujó la puerta de la sala a la fuerza para abrirla. ¡Bam! El sonido aterrorizó a Sally. Ella se dio la vuelta para mirar, solo para descubrir que era Howard entrando con una expresión enojada.

"¿Howard?". Ella miró al hombre que estaba emitiendo un honda asesina, sintiéndose asustada y confundida. Ella preguntó en voz baja: "¿Qué ocurre?".

¡Bam! El puñetazo de Howard se estrelló contra la pared al lado de la cama del hospital y la dejó sorprendida.

"¡Ahora de verdad no entiendo nada! ¡No sabía que Sharon era tan capaz hasta que logró hechizar al Tío!", rugió Howard desesperadamente, pero aún así no pudo desahogar la frustración en su interior.

Los ojos de Sally brillaron. Resultó que todo se debía a Sharon. Sally estaba sonriendo con frialdad en su interior cuando lo vio tan exasperado. 'Sin importar lo que suceda después, ¡Sharon nunca podrá quitarme a Howard de mi lado!'.

"Howard, tú...". Justo cuando ella estaba a punto de decir algo, él de repente se inclinó hacia ella. Él colocó una palma en el hombro de Sally y entrecerró los ojos para observarla. "Dime, ¿quién diablo es Wayne?".

El cuerpo de Sally se puso rígido. Sintió un escalofrío recorriendo por toda su espalda. '¿Cómo... cómo sabe lo de Wayne?'.

'¿Fue Sharon quien se lo contó? ¿Acaso Sharon le contó lo del bebé?'.

Sally reprimió la ansiedad dentro de ella con todo lo que tenía y agitó su cabeza. "¿De qué estás hablando? Yo... yo no conozco a esa persona".

"¿No lo conoces?". Howard alzó su voz, mirándola a los ojos mientras decía con frialdad.

Sally fingió estar tranquila. "No lo conozco. ¿Por qué estás preguntando esto de repente?". Su mano debajo de la manta estaba apretada con fuerza.

"Entonces, ¿qué hay del bebé? ¿Quién es el padre verdadero del bebé? ¿Era mío?". De modo que las palabras que dijo Sharon lo habían afectado de alguna manera. Él empezó a sospechar de ella al fin y al cabo. Sally estaría muerta si de verdad lo había traicionado.

Sally estaba casi desmayada y estaba a punto de revelar su ansiedad ante él. Ella se sentía perdida, pero aún fingía estar enojada y dijo: "Tú... ¿Cómo puedes sospechar de mí? Solo mira cómo estoy yo ahora. Perdí a mi hijo y el médico dijo que ya no puedo embarazarme nunca más. Es Sharon... quien me llevó a este estado. ¿Por qué sigues buscando más problemas absurdos? Aléjate de mí...".

Los ojos de Howard brillaron peligrosamente. "¡Sí! ¡Sharon debería recibir su castigo! ¡Te juro que nunca la dejaré en paz tan fácilmente!".

Después de que Simon llevó a Sharon al hospital, él inmediatamente hizo que el médico le chequeara el cuello y la garganta.

En ese momento, el médico ya le había recetado algunos medicamentos. Ella solo tenía que seguir la receta y se recuperaría después de tres o cuatro días.

Sharon no esperaba que él tuviera tanta prisa por llevarla al hospital, solo para que la hicieran un chequeo.

Después de que Sharon consiguió su medicamento y estaba a punto de irse del lugar con él, de repente pensó en algo cuando se dirigieron a la puerta. Sus pasos desaceleraron.

El hombre que estaba caminando delante se dio la vuelta para mirarla. Él frunció el ceño y preguntó: "¿Qué ocurre?".

Ella frunció los labios y dijo con vacilación: "Bueno... puedo regresar yo misma. Hay tantas cosas que tienes que hacer en la empresa para ponerte al día con los trabajos. Puedes irte primero. No hace falta preocuparte por mí ahora".