Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 884

Henry vio a Tammy caminar ansiosa hacia él tan pronto puso un pie en la mansión independiente que ella le había asignado en la Mansión Chester.

Sin embargo, cuando la mujer llegó frente a él, volvió a ocultar la ansiedad que cargaba en sus ojos. Ella intentó disimular sus emociones con la etiqueta que le correspondía como la Joven Dama de la familia Chester. Levantó levemente la barbilla y dijo con expresión severa: "Veo que decidiste volver, después de todo".

Henry la miró y no se tomó en serio el actual disgusto de la mujer. Solo le dijo vagamente: "¿Por qué no lo haría? Tú estás aquí". Sonaba como si hubiera dicho esa frase para hacerla feliz, pero en realidad, solo lo decía como una mera cortesía. Incluso si había jurado vengarse de la familia Chester, él y Tammy seguían en términos relativamente amistosos.

A Tammy no le importaba si sus palabras eran genuinas o no; solo se sentía mejor después de escucharlas. Trató de contener su alegría e incluso su tono se suavizó mientras decía: “¿Pudiste ver a Franky y Sienna? ¿Cómo están ahora?”.

La mirada en los ojos de Henry cambió ligeramente al escucharla, y preguntó: "¿Me preguntas porque de verdad quieres saber? ¿O estás preguntando por Gerald?”. Era imposible que no supiera que su padre había enviado a unos asesinos por ellos.

Tammy frunció el ceño ante esto. Las palabras del hombre parecían haber herido sus sentimientos. "¿Dudas de mi?". ¿Cómo era posible que creyera que no estaba siendo sincera?

“Bueno, al fin y al cabo, Gerald es tu padre. Pero puedo entender si te está poniendo en una posición difícil". ¿Quizás estaba intentando sacarle información para después reportarle a Gerald?

"¿Cómo te atreves…?". ¡Tammy estaba furiosa! Habían pasado mucho tiempo juntos, por lo que ella pensó que él sería capaz de confiar en ella. Respiró hondo, tratando de calmar sus emociones. Después de esto, se inclinó frente al hombre, tomó las grandes y bien definidas manos de él, y lo miró a los ojos sin parpadear. "Henry, ¿no lo entiendes? Mi corazón solo es leal a ti". ¿Cuántas veces tendría que repetirle esto?

Los ojos de obsidiana de Henry adquirieron una mirada aún más sombría. Se limitió a quedarse mirándola durante un rato, sin hablar. Su voz sonó algo fría cuando dijo: "Si tuvieras que elegir entre Gerald y yo, ¿qué lado escogerías?".

Las pupilas de Tammy se encogieron levemente. “Sé que ustedes dos tienen algún tipo de malentendido en este momento, pero…”.

Por lo tanto, luego de ducharse y ponerse ropa limpia, recibió la comida que Tammy le pidió al chef que le preparara.

Cuando Tammy lo vio tomar el tenedor y el cuchillo y llevarse la comida a la boca, sus labios se curvaron inconscientemente. Le había preocupado que él no comiera nada. Ella colocó un vaso de jugo frente a él y le dijo: “Bebe un poco de esto. Le pedí al nutricionista que preparara esto especialmente para ti. Te ayudará a calmar tu cuerpo y mente, y ayuda a aliviar la fatiga".

Henry la miró y luego miró el vaso de jugo. No rechazó el vaso y extendió la mano para tomarlo. Sin embargo, cuando colocó el borde del vaso en sus labios, sus ojos adquirieron una mirada sombría tan pronto percibió el olor que emanaba.

"¿Qué ocurre? ¿No te gusta?”. La expresión de Tammy no parecía inusual.