Resumo de Capítulo 909 – Uma virada em Ten cuidado, mi papá CEO de Internet
Capítulo 909 mergulha o leitor em uma jornada emocional dentro do universo de Ten cuidado, mi papá CEO, escrito por Internet. Com traços marcantes da literatura Amor, este capítulo oferece um equilíbrio entre sentimento, tensão e revelações. Ideal para quem busca profundidade narrativa e conexões humanas reais.
“Muy bien. Señorita Chester, ¿puede acercarse un poco más?…Y señor Henry, por favor, sonría. Estamos tomando fotos de la boda, así que debería ser una ocasión alegre. No es un evento serio, ¿de acuerdo?”. Cuando el fotógrafo vio la expresión relajada y seria de Simon, él se quedó un poco estupefacto.
“Henry, sonríe un poco”, le susurró Tammy.
Sin embargo, Simon seguía diciendo con indiferencia: “No puedo sonreír. ¿Qué tal si dejamos la sesión de fotos?”.
Tammy respiró hondo y una vez más lo complació: “Está bien. No tienes que sonreír. Sonreiré por los dos”.
El fotógrafo no tuvo más remedio que decirle a Tammy: “Señorita Chester, ¿por qué no le da un beso en la cara? Se verá más romántico”.
Tammy estaba a punto de hacerlo, pero Simon apartó la cara hacia un lado mientras fruncía el ceño y decía: “Estamos tomando fotos de boda, no fotos casuales. Por favor, sé más digna”.
Tammy se sobresaltó cuando vio lo repugnante que el hombre la encontraba. Ella casi no pudo contener su enojo. ¿Era tan doloroso casarse con ella? Su rostro se volvió más frío mientras decía: “Henry, sé que realmente no quieres casarte conmigo. Pero ahora que hemos negociado los términos, ¿no deberías al menos cooperar conmigo?”.
“¿Acaso no estoy cooperando contigo en este momento?”. De lo contrario, él se habría ido de ese lugar hacía mucho tiempo. ¿Por qué se quedaría para tomarse fotos de boda con ella?
Tammy no pudo refutarlo. Después de todo, él tenía razón. Era bastante bueno que él aún estuviera dispuesto a tomarse las fotos. ¿Cómo podía esperar que él se tomara las fotos con ella con una sonrisa?
“Señor fotógrafo, vamos a hacer una serie de fotos de boda dignas y solemnes sin sonrisas ni afecto. ¿Entendido?”, dijo Tammy.
“Lo… entiendo”. Esta era la primera vez que el fotógrafo veía a una pareja soltera como esta.
“¡Cállate! ¡Sigue diciendo más tonterías y descubrirás cómo lidiaré contigo!”. Tammy le arrojó de inmediato el ramo en su mano con una expresión fría y enojada.
Trevor fue tomado por sorpresa. Él sintió un poco de escozor al ser golpeado en la cara por el ramo. “¿Qué? ¿Dije algo malo? ¿Por qué estás tan avergonzada y enojada? ¿No te vas a casar con un hombre lisiado?”. Trevor notó que Simon estaba ahí, así que dijo deliberadamente estas palabras para fastidiarlo.
Inicialmente, Simon no planeaba unirse a la discusión de los hermanos, pero no podía quedarse de brazos cruzados después de que lo llamaran un lisiado.
“Hablando de la verdadera discapacidad, creo que... ni siquiera eres un hombre de verdad ahora, ¿no es así? Tú eres el que está realmente lisiado aquí”, dijo Simon sin prisa mientras lo miraba.
La expresión de Trevor cambió y su expresión se volvió muy sombría. ¡Él no habló por un tiempo!
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