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Tú decidiste Rechazarme romance Capítulo 23

Samara Pov:

Estoy desayunando con Cassandra, Jessica y Mary Anne.

- ¿Y a tu primo le gustan las pastas? - le preguntó Jess a Mary, en verdad que está desesperada por ese tipo.

Lleva todo el desayuno haciéndole preguntas a Mary, intentando conocer más de los gustos de su mate, pero vamos, creo que se está pasando un poco.

- Depende- respondió Mary algo cansada.

- ¿Como que depende? - pregunto algo alterada.

- Ya deja de presionarla, Jessica - dijo Cass - Es una niña de 10 años, no sabe toda la puta vida de su maldito primo- dijo ya molesta, y para ser sincera yo también ya estaba cansada de ella y su maldita obsesión por ese hombre. Ni Casi, que está locamente enamorada y pérdida por Víctor lo hace.

- ¡Solo quiero saber más cosas del amor de mi vida! - contesto también molesta.

- Pues investígalo sin tener que arruinarle el desayuno a la niña- gritó Casi.

- ¡Yo investigo como se me dé la gana! - le respondió de la misma manera.

Cassandra iba a responder.

Golpee con ambas manos la mesa, ambas se callaron al escuchar el fuerte golpe.

- ¡Cállense! - grite yo, ya cansada de la discusión que se formó en la mesa- Chicas, las amo y mucho; pero, por favor, paren con esta absurda discusión de una buena vez ¿Sí?

Ambas me miraron sorprendidas y algo intimidadas por mí.

- Está bien- escucho como Cass habla entre dientes.

Dirijo mi mirada hacia Jess y ella ni siquiera me mira, solo asiente con su cabeza.

- Gracias- acomodándome en mi asiento.

Veo de nuevo mi desayuno.

Sonó el timbre de la casa.

No hice caso y seguí con mi desayuno.

Volví a mirar el libro de anti hechizos que llevo leyendo desde hace unos días.

Tomo un sorbo de mi café.

- ¿Qué lees? - me pregunta Mary.

- ¿Cómo sabes que estoy leyendo? - le pregunte confundida mientras llevaba un pedazo de pan a mi boca.

- Te conozco; tomaste tu sorbo de café distraída, no te diste cuenta de que lo que acabas de tomar es mi jugo de naranja- miro la mesa y donde yo pensé que había dejado de mi café, estaba el jugo de naranja de Mary Anne- O estabas mirando tu celular o estabas leyendo- me sonrío.

- Eres muy hábil y astuta, deberías estar en el FBI- le dije adulándola; ella me dio una sonrisa.

- Gracias- me respondió.

- Princesa- dirijo mi atención a quien me llamaba; era una de las sirvientas que estaba en la puerta del comedor- El Alfa Marcus la busca a usted y a la pequeña Mary Anne.

Mi vista viaja hacia Mary Anne, suspiro y luego hablo.

- Hazlo pasar a la sala, por favor; ahora vamos- dije, ella asintió con su cabeza y salió del comedor.

Mary Anne termino de comer.

- ¿Terminaste de desayunar? - le pregunte y ella asintió con la cabeza- Esta bien, vamos, es hora de que veas a tu hermano.

Ambas nos paramos de nuestros asientos.

- ¿Estará mucho tiempo aquí? - me pregunto.

- Tranquila, solo lo necesario- le respondí.

Salimos del comedor y caminamos hasta la sala.

Al llegar veo a Marcus sentado en uno de los sillones, al vernos se levanta de su asiento.

- Mary - Marcus se acercó a saludarla- ¿Estás bien? - ella asintió con su cabeza; Marcus le sonrío, el volteo a verme- ¿Y tú? - me pregunta también con preocupación en sus ojos.

Suspiré.

- Bien, gracias por preguntar- él me dio una sonrisa dulce- Solo que he tenido un poco de estrés últimamente, ya sabes, muchas cosas que hacer antes de mi coronación y tan poco tiempo- mire hacia otro lado y suspire pesadamente, me sentía algo cansada- Ven, siéntate, por favor- dije extendiendo mi mano en dirección de los sillones.

Nos sentamos en el sillón de tres cuerpos. Mary Anne se sentó en el suelo, justo frente a nosotros mientras que la mesa de centro le servía como apoyo mientras empezaba a dibujar.

- Julisa- la llame.

Ella llego unos cuantos segundos después de que la llamara, como si estuviera a la espera de mi llamado.

- ¿Si princesa? ¿Necesita algo? - me pregunto.

- ¿Me traes por favor el libro que deje en el comedor?

- Como diga, princesa- dijo ella antes de salir corriendo.

- ¿Que lees? - me pregunto Marcus.

Antes de poderle contestar, Julisa llegó con el libro, se acercó a mí.

- Estoy buscando alguna cura para la maldición que Kalipso le puso a Mary- dije tomando el libro de las manos de Julisa- Gracias- le digo a Julisa, ella asiente con su cabeza mientras sonríe y se retira- Es algo difícil, pero sé que lo lograre.

- ¿Tanto la quieres? - me pregunto.

Su pregunta me desubico totalmente, lo mire con desconcierto.

- Es como la hermana menor que nunca tuve- le respondí- Creo que si tu tuvieras la posibilidad de poder hacer algo por ella lo harías- dije y él solo solo asintió con su cabeza.

- Claro que lo haría- me respondió, no dije nada más.

Deje de mirarlo. Abrí el libro para empezar a leerlo.

- Eres muy buena, gracias por todo lo que haces por ella- me dijo con una sonrisa, lo miró y le sonrío apenas- Oye te traje un capuchino de caramelo, sé que es tu favorito- me dijo agarrándolo de la mesa de centro y dándomelo.

Maldita sea.

- Yo lo sé- respondió ella antes de dejarme hablar- Su nombre comienza con Jack y termina con Son- me dijo "divertida", confirmando mis sospechas principales- Cualquier chica se enamoraría de la persona que la hizo suya por primera vez ¿No crees? - yo la miré- O bueno, las chicas como ella; ya sabes- camino hasta estar detrás de mí- Las chicas que fantasean con el: “Y vivieron felices para siempre de los cuentos de hadas”; las que aman leer y creen en el amor verdadero. Definitivamente ese tipo de chica es Samara Moon, una romántica empedernida.

- Mierda- dije molesto- ¿Y ahora que haré? - pregunte volteándola a mirar.

Ella volvió a caminar hacia su escritorio.

- No te preocupes, si me das un buen pago, lograre quitarle esos recuerdos; después de todo, ella muy pronto necesitará de mi- dijo sentándose al frente de su asiento en el escritorio.

- ¿Cómo lo sabes? - pregunte sin entender.

- Me contaste que está buscando una cura para tu hermana ¿Verdad? - yo asentí con mi cabeza- Pues entonces si es tan lista como parece, investigará y dará con la cura.

- ¿Y.... esa es? - pregunte para que siguiera hablando.

- Lleva más ingredientes, pero el principal, es la sangre de la bruja que realizo el hechizo- sonrío de manera maliciosa.

Una gran sonrisa se apodero de mi rostro al entender.

- Eres demasiado buena en esto.

- Es un don- se encogió de hombros- Sabes que al igual que tú, quiero que llegues a ser rey. Aunque a tu padre le allá disgustado que estés trabajando conmigo, pero estuvo bien que lo detuvieras antes que fuera a avisarle a los demás- se acercó a mí, puso sus manos en mi cuello con sutiles caricias- No lo sé, pero tienes algo... tu alma es tan excitante... eres capaz de hacer lo que sea para obtener lo que quieres; fuiste capaz de matar a tus propios padres- acaricio mi cara- No solo eres lindo, también listo; sabes lo que quieres y estás dispuesto a todo por conseguirlo- me besó en la comisura de mis labios. No aguante más y la tome de la cintura para apegarla más a mi- Y no olvidamos lo bueno en la cama- la bese, nos separamos por falta de aire- Será una pena cuando te cases, en verdad me gustan las noches en las que me haces compañía.

- No te preocupes, ella solo pasará hasta un tiempo después de la noche de bodas, y después... nuestra pobre reina tendrá un trágico accidente- le sonreí maliciosamente, ella me imito.

- Ese es mi muchacho- me besó.

Nos dejamos llevar, el beso se hizo más intenso.

Pero de todo esto, estoy muy segura de algo…

Samara me volverá Rey, pero tendrá que sacrificarse para que yo pueda gobernar en paz.

(...)

Samara Pov:

Por fin había dado con el antídoto para la maldición de Mary Anne.

Empecé a leer lo que necesitaba.

Todo estaba fácil de encontrar, pero entonces llegue al ultimo ingrediente de la lista.

"Sangre del hechicero que maldijo a la víctima"

- ¿Qué? - volví a leer esa línea- Carajo.

Y ahora ¿Cómo conseguiré la sangre de Kalipso?

Tendré que ir a buscarla.

Cueste lo que me cueste, Mary volverá a ver....

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