Resumo de Capítulo 0232 – UN BEBÉ PARA NAVIDAD por Day Torres
Em Capítulo 0232, um capítulo marcante do aclamado romance de Romántica UN BEBÉ PARA NAVIDAD, escrito por Day Torres, os leitores são levados mais fundo em uma trama repleta de emoção, conflito e transformação. Este capítulo apresenta desenvolvimentos essenciais e reviravoltas que o tornam leitura obrigatória. Seja você um novo leitor ou um fã fiel, esta parte oferece momentos inesquecíveis que definem a essência de UN BEBÉ PARA NAVIDAD.
Loan continuó hacia su oficina y no se sorprendió de que Ailsa ya lo estuviera esperando.
—Señor Keller... —saludó estrechando su mano antes de entrar con él a la oficina y dejar con él una larga historia de arrepentimiento y lamentaciones—. No puede decirme que su madre no se ha equivocado nunca —murmuró llorando—. Todas las madres hacemos cosas innombrables por la felicidad de nuestros hijos, y yo que equivoqué, lo admito, pero solo porque pensaba que estaba haciendo lo mejor para ella. ¡Era una niña, por dios! ¡Con otro niño en brazos! ¡Iba a perder todo el esfuerzo de su vida, todo su futuro...! ¡No quería eso para ella, no quería que terminara como yo, sirviendo mesas o limpiando la mierd@ de los ricos en sus casas de lujo!
Loan suspiró, porque por más que odiara reconocerlo, eso era exactamente lo que había terminado haciendo Danna.
—Señora Frasier, de verdad quisiera ayudarla, pero no sé cómo. Danna está muy dolida y con razón, y ella no es una mujer de perdón fácil —sentenció.
—Lo sé... al final eso también lo sacó de mí... Me dijo que me fuera, pero yo no puedo, no quiero dejar a mi hija —insistió Ailsa—. Me quedaré tanto como sea posible... mientras me alcance el dinero... Luego ya veré qué hago o dónde trabajo, pero no me voy a rendir con ella. Yo la quiero mucho, tengo que conseguir su perdón.
Loan asintió, pero no le dijo nada más. La verdad era que ni siquiera estaba dispuesto a presentarle al bebé sin autorización de Danna, así que solo le pidió que se mantuviera un poco alejada para no estresar a Danna.
El día del Festival llegó muy pronto y Loan sacó la reserva de su palco en el rink para toda la familia. Cuando llegó al camerino para buscar a Danna, ella salió con su mini vestido precioso y los ojos brillantes por la emoción. Loan le entregó un ramo de flores y la besó.
—Rómpete una pierna.
—Eso es en el teatro, Loan —rio ella.
—¡Ah, bueno, entonces no! Mucha suerte, pelirroja, estoy muy orgulloso de ti.
Él se regresó al palco y Danna se sentó con Ted junto a una de las entradas. Pero justo cuando estaba a punto de empezar el show, Danna vio que Ailsa se acercaba lentamente a ellos.
Comentários
Os comentários dos leitores sobre o romance: UN BEBÉ PARA NAVIDAD
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