Un Matrimonio por Dulce Amor romance Capítulo 50

Poco tiempo después, la cena estuvo lista.

Los platos no eran considerados suntuosos. Sólo erancuatro sencillos platos con una sopa, pero se veían muy deliciosos y su fragancia abría el apetito.

Xi Xiaye, quien se sentó lejos en el sofá, ya podía sentir débilmente el aroma de la tentador aroma.

—Toma un poco de jugo de fruta. Con tu herida, es mejor si no bebes.

El hombre en el lado opuesto le sirvió un vaso de jugo de fruta y lo puso elegantemente delante de ella. Cuando él vio sus brillantes ojos aturdidos queriendo decirle algo, se detuvo.

Le preguntó: —¿En qué estás pensando tan profundamente?

—Nada...—Xi Xiaye suspiró de manera inconsciente, luego, rápidamente cogió sus palillos. Después de algunas consideraciones, antes de que finalmente se encontrara con sus ojos preocupados, dijo: —Siento que todo esto está sucediendo demasiado rápido. Se siente como un sueño.

—¿No eres alguien que se adapta rápido?—Mu Vuchén respondió claramente, y luego empujó el plato de arroz hacia ella, mientras elegantemente levantaba el jugo de fruta para tomar un sorbo—¿O me estás tratando de decir ahora mismo que te estás arrepintiendo?

Cuando lo oyó, Xi Xiaye se quedó en silencio. Entonces agitó su cabeza ligeramente y bajó su mirada en silencio, mientras miraba los palillos en su mano. Después de un tiempo, ella respondió:—No, me temo que si repitiéramos el momento, todavía tomaría esta decisión, pero...

Parecía haber tomado alguna decisión al mirar abruptamente de manera resuelta a Mu Vuchén, sus ojos brillantes estaban llenos de un luminoso esplendor.De repente bajó sus palillos y tomó el vaso de jugo de fruta.En una voz que estaba llena de una rara ternura y sin timidez en lo absoluto, dijo:

—No quiero decir gracias otra vez.Sólo quería decirte que definitivamente haré lo mejor que pueda para ser una buena esposa. Definitivamenteviviremos una vida feliz, ¿verdad, Señor Mu?

Mu Vuchén miró tranquilamente hacia arriba. Sus ojos, que estaban quietos como el océano, se encontraron con los suyos, brillantes y parpadeantes. Su rostro silencioso y hermoso se alivió débilmente mientras respondía a su expresión y levantaba suavemente su vaso también. Sentimentalmente, estuvo de acuerdo:

—Viviremos una vida feliz, y ser una buena Señora Mu sería la mejor manera de agradecerme.

El marido y la mujer chocaron sus vasos con ese brindis.

—Más tempranome llamó el abuelo. Mi madre acaba de volver de completar un informe académico y quieren que haga tiempo para visitar la residencia Chen dentro de dos días. ¿Quieres venir?

Ya que decidieron dejar que la naturaleza siguiera su curso y continuar éste viaje, Xi Xiaye no planeaba ocultar nada. Aunque entendía muy claramente que si realmente quería que su abuelo y su madre dejaran de preocuparse, tendría que decirles acerca de éste matrimonio.

Sin importar lo que pasara, ya habían llegado a éste punto, así que al menos deberían ser leales a éste viaje matrimonial que estaba a punto de comenzar.

—¿Cuándo estás planeando volver?

Mu Vuchén ahora más o menos entendía su situación.

Sabía que su abuelo había sido camarada con su abuela cuando eran más jóvenes.

—Éste fin de semana—contestó antes de volver a recoger sus palillos.

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