Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 1018

Bastante seguro, Tony dijo: "Arresten a Yoan Dommy, Hacent Zeller, Lashawn Saffer, Kyle Zinn y Tyler Moquel inmediatamente. Que los interroguen y castiguen como sea necesario".

Unos cuantos agentes especiales se adelantaron a la vez para sujetar a estos hombres.

"Sawyer, tu hijo amenazó físicamente a alguien y causó disturbios públicos. Tu responsabilidad en esto es innegable y serás suspendido de todas tus funciones para cooperar con la investigación", continuó Tony, mirando a Sawyer.

Sawyer sabía que su destino estaba decidido y solo pudo asentir sin decir una palabra.

Ya sabía quién era Wilbur.

Ya no había esperanza para Sawyer, no después de que su propio hijo hubiera ofendido a alguien de esa manera tan terrible.

Tony miró fríamente a su alrededor y gritó: "¡Arréstenlos a todos!".

Los agentes de las Fuerzas Especiales esposaron a todos los culpables y los sacaron de la cafetería.

Fue entonces cuando Tony se marchó finalmente con todos los demás.

Cuando se marcharon, el resto de la gente se puso a discutir. Todo el mundo quería saber quién era ese joven y cómo se las había arreglado para tener a Tony Howie en sus manos.

Aquello había sido realmente increíble.

Se corrió la voz con bastante rapidez y no pasó mucho tiempo antes de que toda la Ciudad Nicho estuviera alborotada.

Era importante señalar que los cuatro príncipes de la Ciudad Nicho eran una de las fuerzas más poderosas de la ciudad. Ahora que todos habían sido arrestados, algunas personas estaban sintiendo un cambio inminente y creciendo hambrientos en anticipación.

En la carretera, Wilbur seguía pensando en el esternón de cristal cuando sonó su teléfono.

"Su Santidad". La voz del arzobispo Karl Robin, de la Iglesia del Sagrado Señor de los Dragones de Fuego, sonó a través del teléfono.

"Hola, Karl. ¿Pasa algo?".

"En realidad no, pero...".

Mientras ella estuviera cerca, la Iglesia del Sagrado Señor de los Dragones de Fuego no tendría nada de qué preocuparse en términos de crecimiento y expansión, aunque no tuvieran suficiente dinero.

Sin embargo, el dinero sin duda ayudaría a la iglesia a crecer aún más rápido, lo que también era importante para Wilbur.

Al fin y al cabo, no todos los días se tenía la oportunidad de asomarse a los secretos de los dioses.

Justo entonces, Karl dijo: "Su Santidad, ¿deberíamos frenar un poco el crecimiento de la iglesia? Estos gastos son demasiado para soportarlos y estoy seguro de que no tendremos muchos problemas para amasar creyentes mientras la Patrona Santa Catherine esté por aquí".

Sin embargo, Wilbur rechazó la petición de inmediato. "No. Te enviaré otros diez mil millones de dólares ahora mismo. Solo tienes que concentrarte en hacer crecer la iglesia. No te preocupes por el dinero".

"¿Qué? ¿Diez mil millones de dólares?". Karl estaba conmocionado hasta la médula.

Con ese dinero y cómo estaba creciendo la iglesia ahora, los diez mil millones de dólares podrían no durar mucho.

"¿Quiere reconsiderarlo, Su Santidad? Ese dinero va a desaparecer a una velocidad aterradora", dijo Karl con cautela.