Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 1107

Fue una transacción por valor de 50 millones de dólares.

Tras regatear un poco, Demi y Smith acordaron 450 mil dólares por mujer.

La conversación hizo que las vidas de estas mujeres parecieran mercancías que se intercambiaban por dinero.

Ninguno de los dos sentía el más mínimo sentimiento de culpa por este claro caso de tráfico de personas, incluso parecían engreídos y satisfechos de sí mismos.

Wilbur no pudo evitar suspirar para sus adentros.

No era difícil imaginar lo que les ocurriría a estas mujeres.

Sin duda las venderían en el extranjero y las obligarían a realizar trabajos humillantes hasta que envejecieran o contrajeran una enfermedad incurable. Entonces, se les extraerían los órganos y desaparecerían del mundo para siempre.

Wilbur apenas se atrevía a imaginar por lo que habían pasado aquellas mujeres hasta entonces.

Demi y Smith acordaron un precio y, a continuación, una hora y un lugar para llevar a cabo el intercambio.

Demi se levantó después de eso y ambos se estrecharon la mano antes de que ella regresara a la Corporación Leeker con Wilbur.

A Wilbur le dijeron que se marchara después. Demi cerró la puerta de su despacho y empezó a hacer una serie de llamadas.

Wilbur se paseó por la empresa para supervisar y echar un vistazo, y luego se dirigió a su despacho. Cerró la puerta y se sentó, encendiendo un cigarrillo.

Había intentado dejar una huella espiritual en Demi hace un momento.

Sin embargo, al hacerlo, se dio cuenta de que una misteriosa energía cubría el cuerpo de Demi.

Wilbur retiró de inmediato su energía espiritual.

Antes se había dado cuenta de que Demi parecía llevar o portar algo que la protegía, y al hacerlo pudo confirmar sus sospechas.

El objeto era sin duda precioso, algo en lo que se había gastado un buen dinero.

Wilbur tendría que tener cuidado con esto.

Estaba pensando en cómo salvar a estas mujeres.

Podía perfectamente escabullirse, cambiar de aspecto y salvar a los rehenes por la fuerza.

Wilbur decidió formar un plan para salvar a estas mujeres con Orin.

Sin embargo, probablemente no era lo más seguro hacer esa llamada aquí.

Según su energía espiritual, Wilbur había detectado que había al menos tres cámaras ocultas en su habitación.

Justo cuando Wilbur estaba a punto de salir pretendiendo ir a cenar, sonó la alarma del edificio de la sede de la Corporación Leeker.

La expresión de Wilbur se ensombreció y salió disparado hacia el despacho de Demi.

Las docenas de guardias armados de guardia corrieron también hacia el despacho de Demi y los demás se prepararon para un ataque de francotiradores.

Wilbur atravesó la puerta del despacho de Demi para entrar, donde ella estaba sentada mirando fríamente la gigantesca pantalla de control de la pared.

Unos cien hombres armados y enmascarados habían irrumpido en el edificio y se dirigían hacia allí.