Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 1112

El rostro de Smith se quedó sin color. Se tambaleó hacia atrás mientras los dos hombres que dirigían el bote se acobardaban en un rincón.

"¡No puedes matarme! Soy de la familia Smith, ¡y mi clan acabará con tu vida si te atreves a ponerme un dedo encima!". Smith empezó a amenazar a Wilbur en un intento desesperado por salvarse, todo ello mientras enviaba un mensaje pregrabado en su teléfono.

Wilbur fingió no ver eso. No era como si importara.

Las amenazas vacías como esas apenas valían algo para empezar.

Wilbur clavó su espada en el hombro de Smith, levantándolo por los aires.

Smith gritó de agonía, con la mirada llena de terror.

Wilbur lo miró directamente a los ojos. "Deberías rezar para que nunca me encuentre con alguien de tu clan. Los mataré a todos por dirigir un negocio como este".

Un profundo terror surgió en el alma de Smith.

Wilbur hizo una mueca fría. La Oscura Dispersión se estremeció y el cuerpo de Smith estalló en una salpicadura de sangre y vísceras.

Wilbur miró a los responsables de conducir el bote y ordenó: "Sigan conduciendo".

Ambos hombres se apresuraron a levantarse, conduciendo el bote hacia delante como Wilbur les ordenaba.

Ninguno de los dos se atrevía a decir una palabra ante alguien tan poderoso.

Justo entonces, Wilbur sacó el teléfono de su demiplano y empezó a hacer una llamada.

No tardó en colgar.

Al cabo de media hora de navegación, una lancha rápida apareció de la nada.

Un grupo de agentes de las Fuerzas Especiales subió de inmediato al bote y algunos de ellos se apresuraron a consolar a las mujeres retenidas como rehenes.

El jefe del equipo de agentes inspeccionó detenidamente la embarcación antes de dirigirse a la cabina con otros dos agentes.

"Líder de las Fuerzas Especiales de Aduanas, Kenan Gander reportándose al servicio, señor". Kenan se inclinó respetuosamente ante Wilbur.

Wilbur le devolvió la reverencia. "Te lo dejo a ti entonces. Asegúrate de que estas mujeres lleguen a casa sanas y salvas".

"No se preocupe. Me aseguraré de ello", dijo Kenan en voz alta.

Wilbur asintió y saltó del bote antes de adentrarse en la noche.

Kenan contempló la escena que tenía ante sí, sintiéndose nada más que abrumado por la emoción.

Ayer recibieron la misión secreta.

En ese momento, llamaron a la puerta.

"Adelante", dijo Wilbur con voz grave.

El asistente de Demi entró en la habitación, mirando a Wilbur de arriba abajo con una sonrisa. "La señora Madres desea verlo".

"Enseguida voy", dijo Wilbur.

El asistente echó un vistazo a la habitación de Wilbur y le devolvió la sonrisa. "Acuérdese de cerrar las ventanas".

Wilbur enarcó una ceja y el asistente se marchó con una última sonrisa.

Wilbur terminó de prepararse. Miró las ventanas abiertas, antes de dirigirse al despacho de Demi sin emoción.

Demi levantó la vista con una sonrisa. "¿Dormiste bien anoche?".

"Sí. Dormí durante toda la noche", dijo Wilbur con calma.

Demi asintió. "Ve a prepararte. Tengo que asistir a una reunión importante por la tarde. Voy a necesitar protección para ello".

"Sí, señora Madres", dijo Wilbur asintiendo.