Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 1157

Como hechizo de Orden Superior, el hechizo Bombas de Trueno era aterrador por naturaleza.

Además, los poderes de trueno y relámpago de Wilbur amplificaban aún más su poder.

Una aterradora presión espiritual llenó toda la plaza en cuanto aparecieron las Bombas de Trueno.

Las sonrisas de los demás alumnos de Isaac y Maddox se tensaron.

Ninguno de ellos esperaba que Wilbur supiera lanzar hechizos, y mucho menos que fuera capaz de lanzar un hechizo de Orden Superior como este.

Era importante tener en cuenta que tantos maestros hechiceros de nivel Santuario no habían sido capaces de dominar el hechizo Bombas de Trueno.

Incluso la cara de Maddox estaba llena de incredulidad.

Wilbur hizo una mueca fría y lanzó las nueve Bombas de Trueno en su dirección.

Este retrocedió rápidamente en un ataque de pánico, cruzando los brazos frente al pecho.

La Tormenta de Cuervos Demoníacos se condensó frente a él, formando un gigantesco espantapájaros.

Este espantapájaros medía unos diez metros de altura. Innumerables cuervos rodeaban su cabeza mientras sostenía dos guadañas frente a su pecho en forma de cruz.

Las Bombas de Trueno se acercaron a gran velocidad.

Innumerables cuervos descendieron en picado, chocando con las Bombas de Trueno.

De repente, la plaza se llenó de una sinfonía de truenos y relámpagos.

Las Bombas de Trueno superaron el ataque de los cuervos e impactaron en el cuerpo del espantapájaros.

El aire relampagueó, haciendo que a todos les dolieran los ojos por la brillante y penetrante luz mientras ensordecedores truenos llenaban el aire.

La oscuridad fue desplazada por esto y el mundo entero pareció iluminarse.

Todos se quedaron atónitos.

Maddox estaba completamente ileso y tenía nuevamente el Báculo del Abismo en sus manos.

Una interminable oleada de energía oscura volvió a penetrar en su cuerpo.

Maddox empezó a irradiar una niebla que rápidamente llenó todo el cielo de la plaza, sumiéndolo todo en la oscuridad una vez más.

Su figura había crecido hasta alcanzar los diez metros de altura. Parecía un demonio de pies a cabeza, irradiando un aura aterradora y asesina.

La poderosa presión espiritual parecía sofocar a todos los presentes.

Incluso Lucio, Demi y los demás se sentían sofocados a pesar de estar muy lejos. Era como si un demonio tuviera sus manos en sus gargantas, listo para asfixiarlos en cualquier momento.

Justo entonces, Maddox dejó escapar una voz grave y áspera, parecida a la de un monstruo del infierno. "Eres bastante impresionante, muchacho, por presionarme hasta este punto. Por respeto a tu tenacidad, te desterraré de este mundo usando el máximo poder con el que me bendijo el Dios de la Oscuridad".