Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 1300

El anciano sonrió débilmente. "Eso todavía puedo manejarlo".

"¿Qué hay que temer? Observemos. Loja es una amenaza interna que debe ser eliminada hoy", dijo fríamente el príncipe Bhumi.

El anciano asintió en silencio, sin decir una palabra.

En ese momento, Wilbur se lanzó repetidamente a la niebla verde, solo para ser repelido por Loja una y otra vez.

La niebla verde se ondulaba y solo se oía la risa maníaca de Loja. Su figura ya era invisible.

Tras ser derribado una vez más, Wilbur miró al cielo. Todas las llamas de energía espiritual de su cuerpo desaparecieron y entonces levantó su alabarda.

La hoja de la alabarda empezó a volverse borrosa, como si estuviera hecha de datos virtuales.

Tras un fuerte grito, levantó la alabarda y volvió a sumergirse en la niebla verde.

Acompañada de un rugido ensordecedor, la figura de Wilbur salió despedida violentamente.

Sin embargo, una poderosa fuerza dispersó por completo la niebla verde.

El cuerpo de Loja se había vuelto aún más grotesco y enorme, y había aparecido una brecha en la espada con forma de serpiente que llevaba en la mano.

Mirando la alabarda fluctuante de Wilbur, Loja dijo incrédulo: "¿De verdad comprendes los principios del espacio?".

"Solo las leyes, no al nivel de los principios", dijo Wilbur con frialdad.

Loja soltó una escalofriante carcajada y dijo: "Sigue siendo impresionante. Sin embargo, no puedes detener mi ascensión y la llegada del Padre misericordioso".

"Sigue soñando. ¿De verdad crees que serás capaz de ascender?", se burló Wilbur.

Loja replicó: "¿Por qué no?".

"¡Solo serás un mero intermediario para su llegada, idiota insensato!", gritó Wilbur.

Con otro grito, Wilbur se precipitó de nuevo hacia delante.

Se mantuvieron alejados de la pelea central y no les afectó.

Wilbur, una y otra vez, atacaba ferozmente a Loja, dando tajos con su alabarda.

Loja podía resistirse, pero bajo el poder de la fuerza de nivel emperador de Wilbur y las leyes del espacio que controlaba, la alabarda parecía atravesarlo todo.

Era un arma capaz de desintegrarlo todo, lo que hacía cada vez más difícil que el Loja transformado pudiera defenderse.

Empezaron a aparecer grietas en la espada con forma de serpiente, a medida que se acercaba a un punto de ruptura.

Loja se enfureció y gritó con rabia: "¡Hijos del Padre misericordioso!".

Blandió su espada en forma de serpiente y las pústulas de su cuerpo estallaron instantáneamente. Innumerables criaturas del tamaño de un puño, feas y verdes como esporas, idénticas a la forma actual de Loja, saltaron y se abalanzaron sobre Wilbur.

Wilbur frunció el ceño. Las esporas chirriaron y se abalanzaron sobre él.

Antes de que pudiera reaccionar, explotaron ante sus ojos.