Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 1651

“¡Puedes venir más tarde si quieres tomar algo!”.

Wilbur fue directo al grano, viendo que el joven guardia en la puerta no estaba dispuesto a ceder. “Rabbick me dijo que preguntara dónde estaban las dos chicas que envió al cuartel general. ¿Pasaron por aquí? ¿Por qué no los puedo contactar? Será mejor que le reportes a Rabbick si tienes alguna noticia o ¡no serás capaz de soportar c*brear a Mondorra!”.

El guardia de la puerta se puso de pie de inmediato, haciendo una reverencia a Wilbur ante la mención de Rabbick y Mondorra. “No sabía qué Rabbick lo había enviado, señor. Deme un segundo, ¡le diré a nuestro jefe ahora mismo!”.

El joven de la puerta se dio la vuelta para correr hacia el bar después de eso.

Wilbur decidió que le daba pereza esperar y siguió al joven hasta el bar.

Al entrar en el bar, Wilbur no pudo ver al joven. En su lugar, había unas cuantas mujeres en minifalda trabajando.

Justo cuando Wilbur se disponía a hablar con una de las mujeres para preguntarle dónde estaba el despacho del jefe, una fuerte voz resonó desde el balcón del segundo piso del bar. “Joven, usted dice que lo envía Rabbick. ¿Tiene alguna forma de demostrarlo? Mientras tengas pruebas, cumpliremos todas y cada una de las órdenes de Rabbick. Pero si no las tienes, ¡me temo que no será fácil que te vayas!”.

Wilbur se dio cuenta, solo por la voz, de que se trataba de un cultivador.

Levantó la vista y vio en el balcón a un hombre alto y redondo, calvo y con un brillo asesino en los ojos.

A pesar de que había derrotado a Rabbick y al resto de los hombres que había traído, que Rabbick llevará dos días desaparecido sería sin duda suficiente para levantar sospechas.

Lo que Wilbur no podía entender era quién podía haberle dado la noticia a Mondorra.

¿Había estado alguien vigilando a Wilbur todo el tiempo mientras él se llevaba a Rabbick y a los demás?

Cuanto más pensaba Wilbur en ello, más extraña le parecía la situación. Era como si alguien fuera por él, obligándolo a salir de su escondite y a enfrentarse a este asunto de frente.