Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 1716

Al escuchar al hombre del traje, Wilbur echó un vistazo a su reloj y respondió con calma. “En realidad pensaba encargarme de ustedes, desgr*ciados que trabajan para Mondorra, dentro de tres días. Sin embargo, ya que han llamado a mi puerta, no me importa matar primero a la mano derecha de Mondorra. Pero que sea rápido. No me hagas esperar demasiado y perturbes mis planes del almuerzo, o me harás enojar. Créeme, no quieres verme enojado. Las consecuencias pueden ser graves”.

El comportamiento de Wilbur cambió de repente, su imponente presencia hizo que el hombre del traje empezará a sudar frío.

“¡Jajaja! Eres todo un charlatán, ¿verdad? No creas que por haber derrotado a Erin, puedes despreciar a los demás. Me gustaría ver si tu fuerza está a la altura de tus palabras”.

De repente, una voz resonó desde el tejado de la fábrica abandonada cercana.

“¡Maestro Ketta! ¡Por fin ha llegado!”.

Al oír esta voz, el hombre del traje se volvió para mirar, visiblemente aliviado.

De hecho, Wilbur se había dado cuenta de la llegada de este cultivador de nivel medio de Santuario mientras hablaba.

Sin embargo, como la otra parte no se reveló inmediatamente. Wilbur actuó como si no se hubiera percatado de su presencia, dejando deliberadamente que lo subestimaran.

Al oír las palabras de su subordinado, el hombre alto y musculoso hizo un gesto despectivo con la mano.

“Cuatro Sombras Tenebrosas, retirense. Esta lucha no les concierne. Hasta que se decida un ganador, no hay necesidad de informar al Maestro Mondorra. No quiero que nadie interrumpa está batalla única en la vida”.

Al oír las palabras del fornido hombre, el hombre del traje obedeció respetuosamente antes de retirarse rápidamente.

Wilbur no prestó atención al hombre del traje que huía, sino que se volvió hacia el hombre corpulento de la azotea.

“Tú debes de ser Ketta, una de las manos derechas de Mondorra. Tus lacayos mencionaron que me buscabas, y aquí estoy. Bueno, muéstrame lo que tienes. Después de todo, solo usé el 20% de mi fuerza para lidiar con tu igual. No me decepciones. De lo contrario solo me harás perder el tiempo esperándote”.

Observando el cambió de expresión de Ketta, Wilbur comentó con calma. “Tu fuerza y tu físico son realmente impresionantes. Pero si crees que solo con la fuerza bruta puedes derrotarme, estás muy equivocado. Para ser sincero, en tu estado actual, ni siquiera estás a la altura de ese cambiaformas. Al menos él me hizo tomarme en serio el combate, ¡pero a ti aún te queda mucho camino por recorrer!”.

Al escuchar la crítica de Wilbur, la expresión de Ketta se volvió cada vez más sombría, y replicó. “Antes solo te estaba poniendo a prueba. Si crees que esto es todo lo que tengo, ¡te espera un final miserable! Nunca seré indulgente con los que se ríen de mí, ¡y te machacaré los huesos igual que hice con ellos!”.

“¡Berserk, Nivel Uno!”.

Con un rugido, el cuerpo de Ketta pareció expandirse.

No solo sus ropas estaban rasgadas, revelando sus bien definidos y fuertes músculos, sino que también emanaba una energía espiritual carmesí.

Mientras su aura se transformaba gradualmente, los ojos de Ketta se volvieron rojos, como si estuviera poseído.