Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 1815

"Bien".

En comparación con la alegría de Tina, Kyra estaba mucho más tranquila. Parecía como si hubiera esperado que esto sucediera.

Wilbur abrió los ojos ante una Tina llorosa. "Estoy bien, Tina. No te preocupes por mí. ¿Demetra está bien?".

Tina sabía que Wilbur era de los que se hacían los duros, y se secó las lágrimas de inmediato antes de volverse hacia Kyra. "Señorita Kyra, ¿se pondrá bien ese tal Demetra?".

Kyra miró a Wilbur. "No se preocupe. El aura de Demetra es muy fuerte, igual que la suya. Además, se benefició mucho de esta batalla".

"Gracias".

"Descansa bien".

Kyra abandonó la habitación, salió al pasillo y marcó un número. "Señor, el Santo fue eliminado".

"Buen trabajo. Supongo que Wilbur Penn realmente es de utilidad para nosotros. No le pierdas de vista, Kyra. Te avisaré si hay otra misión".

"De acuerdo, señor".

Kyra colgó el teléfono y se giró al ver a Tina con lágrimas en los ojos. "Señorita Kyra, usted dijo que me daría la oportunidad de estar con Wilbur siempre y cuando el Santo fuera asesinado. Wilbur lo hizo".

Kyra sonrió a Tina. "No se preocupe. No volveré a darle problemas a Wilbur".

Kyra sabía que el aura producida por estos dos poderes no se parecía a nada de lo que había visto en el mundo, y los dos poderes no pertenecían a este mundo en absoluto. Probablemente venían de una dimensión especial.

Sin embargo, dado que los poderes habían llegado de algún modo a este mundo, solo las élites podrían controlarlos. Los débiles no merecían siquiera saber que los poderes existían.

Si la Corporación Fuente Verde no podía ocultar sus asuntos por más tiempo, Wilbur sería asesinado por las élites de nivel S. En cualquier caso, todo seguiría igual mientras Wilbur permaneciera en Cametra durante los próximos seis meses.

Nadie esperaba que Wilbur viniera a Cametra a investigar en busca de pruebas de sus crímenes, pero ninguno de los altos cargos de Cametra estaba dispuesto a meterse en el lado malo de Valle de la Luz. Aunque dieran una orden para matar a alguien, tendría que hacerlo una élite que no tuviera nada que ver con las dos facciones.

Dado que las élites de los siete países aliados no estaban dispuestas a colaborar con Wilbur, eso significaba que su valor era el más bajo y, por ello, sería el primero en tener una oportunidad en esta misión especial.