Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 1957

Justo después de que Wilbur terminara la llamada, sonó su teléfono con otra llamada de Layla.

"Hola, señor".

"¿Pasa algo, Layla?".

"Señor, acabamos de recibir noticias de que el grupo de asesinos llamado Panteras Negras volvió a aparecer después de desaparecer del círculo de cultivadores por un buen tiempo. Anoche mataron a Jiro y, si no me equivoco, ahora se dirigen a Migorn".

"Creo que quieren acabar con usted, señor".

"Lo sé. Está bien, yo me encargaré".

¿Las Panteras Negras estaban haciendo un movimiento?

Wilbur encontró todo el asunto bastante extraño al colgar. Las Panteras Negras siempre habían estado bajo una poderosa élite secreta, trabajando para él y cumpliendo sus demandas. Esa élite no había dado órdenes durante mucho tiempo y, con el tiempo, casi no se hablaba de los Panteras Negras.

Nadie podía creer que habían reaparecido diez años después, y esta vez iban por él.

Wilbur lo pensó un poco y se dio cuenta de que ni él ni Jiro tenían motivos para ofender a los de las Panteras Negras o a su líder de élite. Ahora que las Panteras Negras habían matado a Billy y habían puesto sus ojos en él, eso quería decir que tal vez no era por culpa de Wilbur ni de Jiro.

El objetivo de las Panteras Negras podría estar relacionado con los Calderos de los Nueve Dragones. Definitivamente no era una coincidencia que aparecieran justo después de que Wilbur interviniera. Tal vez alguien conocía el secreto de los Calderos de los Nueve Dragones. Había muchos cultivadores en todo el mundo que cultivaban el aura de dragón, o al menos Wilbur estaba seguro de ello.

Su padre le sonrió abiertamente. "Tu madre gastó todo su esfuerzo y dinero en esta familia en el pasado, y ahora te tocará a ti hacer lo mismo por nosotros".

Ellen estalló en llantos. Su padre era un bastardo bueno para nada. Desde su matrimonio, la madre de Ellen había tenido muchos trabajos difíciles para mantener a la familia e incluso había tenido que volver a casa para recibir golpes de él. Un día, de camino a casa desde el trabajo, la madre de Ellen estaba tan cansada que no pudo ver el coche que cruzaba la carretera a toda velocidad y quedó paralizada por el accidente.

La madre de Ellen tuvo que pasar el resto de su vida en una silla de ruedas. Sin embargo, a pesar de que ocurrió algo así y de que la familia estuvo a punto de quedarse completamente sin dinero, el padre de Ellen se negó a buscar trabajo, obligando a Ellen a ser el sustento de la familia.

Ahora Ellen era igual que su madre. trabajaba como una esclava todos los días y su padre le quitaba la mayor parte del dinero que tanto le había costado ganar para gastarlo en bebidas alcohólicas en el bar.

Desde el accidente, la madre de Ellen también había quedado mentalmente paralizada, y su condición cambiaba de un día para otro. Si no hubiera sido por su madre, Ellen se habría rendido, pero no sabía cuánto tiempo más podría aguantar.