Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 2056

"Ah, pero eso no es nada".

Tracius dijo. "Protegerlos no fue nada. Lo que les debo es más que eso. Los peligros en el Valle Wearson son mucho más aterradores que cualquiera podría imaginar. Muchos sabían que la Armadura Ligera estaba allí y la anhelaban. Sin embargo, no te la quedaste ni siquiera después de arriesgar tu vida para conseguirla. En su lugar, me diste la armadura a mí. Te lo agradezco eternamente en nombre de mi hermano Tracy. Él siempre ha querido la Armadura Ligera".

"Eso está bien. Antes me dijiste que solo la cuidarías por el momento, ¿no? Al final se la darás a su verdadero dueño".

"Sí, pero sinceramente ya no me interesa tanto la armadura. Olvídalo. Mejor hablemos de la Iglesia de los Santos Illuminati. Como sabes, mi hermano Tracy era el Obispo Negro de la iglesia. Yo también soy miembro de la iglesia. No estoy muy seguro de lo que piensa el Valle de la Luz de ti, pero por lo que sé, mi iglesia siempre ha sido implacable con sus planes de matarte".

Wilbur no estaba muy sorprendido por las palabras de Tracius. Al fin y al cabo, la Iglesia de los Santos Illuminati y la Iglesia del Sangreísmo habían tenido algo contra él desde hace mucho tiempo. Viendo que no habían hecho nada en todo este tiempo, el Valle de la Luz debió darles órdenes de dejarle en paz por ahora.

"Bueno, ¿crees que el Valle de la Luz no ha cambiado de opinión sobre mi por ahora? Ya que ambas iglesias no han hecho nada, ¿verdad? ¿Crees que eso es posible?".

"Debería ser, pero según lo que sé el Arzobispo Púrpura ya está tramando algo parecido. Sospecho que el Valle de la Luz puede cambiar de opinión sobre ti muy pronto. Al principio pensaron que habías muerto en el Valle Wearson, pero lograste sobrevivir superando sus expectativas. Espero que estés preparado para lo que pueda venir".

"Lo haré. Gracias por la ayuda".

"Claro. Te enviaré la información en un minuto".

La llamada terminó y un minuto después el teléfono de Wilbur recibió un nuevo mensaje.

Wilbur había abierto el archivo que Layla le había enviado y vio que las Panteras Negras habían estado en muchos lugares desde su encuentro con Wilbur en Migorn.

No parecía lógico que viajaran tanto en tan solo un mes. ¿Tenían miedo de que descubrieran su secreto y por eso iban a tantos sitios para borrar su rastro? Al fin y al cabo, quizá eran los únicos que sabían dónde estaban el octavo y el noveno caldero del dragón.