Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 2220

Mientras pudiera invocar al dragón formado a partir de su aura de dragón y hacerlo volar a su alrededor, el dragón sería capaz de bloquear el ataque del Espíritu del Viento.

Sin embargo, esta era la única oportunidad que Wilbur tenía. Si fallaba, el Espíritu del Viento probablemente lo mataría antes de que pudiera invocar de nuevo al dragón. Por lo tanto, Wilbur tenía que mejorar su oído y su velocidad de ataque para asegurarse una posibilidad de vencer al Espíritu del Viento.

Con esto en mente, Wilbur decidió lo que haría. Después de media hora, su cuerpo se había recuperado por completo y arrancó una tira de tela de su ropa para usarla como una venda. Tomó una piedra del suelo y la lanzó.

La roca golpeó un gran árbol, haciendo que sus ramas se agitaran mientras caía una oleada de hojas del árbol. La oreja de Wilbur se agitó y lanzó un golpe. Wilbur bailó en el aire, moviendo la espada, y fue atravesando una a una las hojas antes de que cayeran al suelo.

Cuando las hojas pararon de caer, Wilbur se quitó la venda de los ojos para observarlas en el suelo. Vio que la mayoría de las hojas había sido atravesada, pero varias de ellas seguían completamente intactas. La brisa que había soplado antes había cambiado la dirección de algunas de las hojas.

Wilbur frunció el ceño. "Esto no servirá. el Espíritu del Viento era más rápido que el mismo viento. Si ni siquiera puedo igualar esta velocidad, estaría desaprovechando mi oportunidad".

Con ese pensamiento, Wilbur barrió las hojas caídas. Volvió a ponerse la venda y repitió el proceso de golpear un árbol con una roca y atravesar las hojas que se caían.

A unas docenas de metros de distancia, las cejas de el Espíritu del Viento se fruncieron mientras miraba a Wilbur desde lejos. "¿Qué demonios está haciendo este chico?".

Después de intentar perfeccionar su precisión y velocidad una y otra vez, Wilbur consiguió mejorar ligeramente. Sin embargo, las hojas estaban destinadas a cambiar de dirección varias veces mientras caían, por lo que cada vez Wilbur seguía encontrando un par de hojas que no había alcanzado a atravesar.

Después de cada intento, Wilbur se fijaba muy bien en dónde caían las hojas. Después volvía a ponerse la venda en los ojos y empezaba de nuevo.

Wilbur practicó durante dos días enteros, y no fue hasta el mediodía del tercer día cuando logró atravesar todas las hojas que se habían caído. Soltó un largo suspiro y rápidamente se dirigió al núcleo de formación de la derecha, donde estaba el Espíritu del Viento.

Había un débil resplandor dorado donde estaba el núcleo de formación, y el Espíritu del Viento parecía estar disfrutando de él. No abrió los ojos al escuchar los pasos de Wilbur, y simplemente preguntó: "¿Estás aquí?".

"Deja de decir tonterías. Ya estoy aquí, así que hagámoslo", replicó Wilbur.

"Vamos, entonces".

El Espíritu del Viento se hizo invisible, lanzándose hacia Wilbur en forma de una fuerte ráfaga de viento. Al mismo tiempo, Wilbur lanzó un grito de furia. Un escudo blanco de luz se fue formando alrededor de Wilbur, extendiéndose lentamente hasta tener diez metros de ancho a su alrededor.

Al segundo siguiente, el escudo se hizo pedazos cuando el Espíritu del Viento descendió sobre él desde el cielo y su torre mágica atrapó a Wilbur nuevamente. el Espíritu del Viento aterrizó en el suelo, sonriéndole a Wilbur. "Ríndete de una vez. Nadie puede romper mi torre mágica".

"¡Rompe!". Gritó Wilbur.