Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 2282

Smith siguió la mirada de Mackley y vio que efectivamente había una silueta en el desierto. Esa persona caminaba tranquilamente como si estuviera pensando sobre algo.

Smith dijo: "Así es. Ese debería ser el Señor Penn. Después de todo, no debería haber nadie caminando como si nada por esta zona aparte de él".

Mackley asintió. Ambos sabían que el gobierno de Moda no solo envió al ejército de los Demonios Nocturnos a cruzar las fronteras y establecer una estación militar en Kosanto, si no que el gobierno también envió diez mil soldados para establecer campamentos militares y siete bloqueos individuales cerca de las fronteras para que el ejército de los Demonios Nocturnos no se volviera contra Moda.

El ejército de Moda también creó tres conjuntos de planes después que comenzara la operación.

El plan A era convencer a Wilbur de unirse al ejército de Moda y trabajar para ellos.

El plan B era convencer a Wilbur que renunciara a interferir.

El plan C era que el ejército de Moda interviniera si las negociaciones fracasaban. Luego matarían a Wilbur y estudiarían su cadáver.

Después de todo, un nivel Emperador podía luchar contra varios cultivadores solo. Los militares tenían curiosidad sobre qué tipo de estructura corporal especial tenían estos cultivadores que los hacía tan poderosos.

Muchas naciones y sus ejércitos sentían que los cultivadores debían tener alguna estructura física especial que les otorgara capacidades extraordinarias. Los militares no estaban dispuestos a darles a los cultivadores una posición alta. Solo querían diseccionar a dichos cultivadores y realizar investigaciones sobre su estructura corporal, luego los replicarían y crearían una serie de súper soldados para ellos mismos.

Wilbur instintivamente retrocedió y los miró con cautela, preguntando: "¿Quiénes son ustedes? ¿Cómo saben mi nombre?".

Mackley y Smith se miraron y se rieron porque no esperaban que el cultivador nivel Emperador pareciera tan común.

Al principio, les preocupaba que Wilbur fuera un tipo arrogante y no estuviera dispuesto a negociar. Sin embargo, parecía que sus temores no tenían fundamento.

Mackley se encogió de hombros y dijo: "No necesitas preocuparte, Señor Penn. No queremos hacerte daño".