Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 2286

Resumo de Capítulo 2286: Viviendo con Mi Jefa Esposa

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Cualquier proyectil usado contra Wilbur al final era devuelto al ejército. No solo no lastimó a Wilbur, sino que también causó más daño al mismo ejército.

Sin embargo, los misiles dirigidos eran diferentes. El cargamento tenía dispositivos especiales incorporados. Cualquier cambio en la presión haría que los misiles explotaran inmediatamente. Incluso si Wilbur tuviera control sobre el dominio espacial, al menos los misiles explotarían cerca de él en vez de ser enviados de regreso.

La poderosa explosión de los misiles también propulsaría sus fragmentos a una velocidad extrema.

Dale creía que Wilbur no podría detener los fragmentos del misil, que terminarían atravesando el cuerpo de Wilbur y matándolo en el proceso.

Como se esperaba, varios cientos de misiles dirigidos explotaron cuando se acercaron a Wilbur. El cielo se iluminó instantáneamente. La figura de Wilbur fue devorada por las explosiones de fuego. No obstante, Dale ordenó a sus tropas que siguieran lanzando más misiles dirigidos hacia él.

Un total de mil misiles dirigidos fueron lanzados y explotaron alrededor de Wilbur. Dale había usado la mitad de su suministro de misiles solo para matar a Wilbur.

Sin embargo, los soldados encontraron a Wilbur flotando en el aire después que el humo y el fuego se desvanecieran. Los fragmentos de misiles de las explosiones no dañaron a Wilbur en absoluto. Todos los fragmentos fueron encontrados flotando en el aire junto a Wilbur. Luego los juntó en una gran bola.

Llevó la bola a la parte superior del campamento militar y gritó: "¡Aquellos que quieran vivir, váyanse de inmediato! ¡Tienen un minuto!".

Muchos soldados dejaron caer sus armas sin esperar las órdenes de Dale. Se dieron la vuelta y corrieron porque sabían que el cultivador era invencible. La gente común y los cultivadores eran de mundos diferentes. Creen que aquellos que no corrieran solo morirían ya que el ejército de Moda había provocado al cultivador.

Los soldados tenían sus propias familias, por lo que no estaban dispuestos a morir en vano.

"Señor, muchos de nuestros soldados están huyendo".

¡Bam!

"¡Sí!".

Dale cargó la bala en la pistola y se dio la vuelta de repente. Apuntó al vicecomandante y lo mató de un disparo. Smith abrió la boca en estado de shock mientras miraba desde un costado.

Dale dejó caer la pistola y se crujió el cuello. Dijo con frialdad: "Nadie puede obligarme a disculparme en este campamento militar".

Wilbur miró a los soldados que huían en manadas desde el aire y sintió que su ira se calmaba. Podía decir por la escala de los soldados que escapaban que la mayoría de ellos no estaban dispuestos a participar en una guerra sin sentido. Los que se quedaron atrás siguieron apuntando sus armas a Wilbur, bañándolo con más balas.

"¡Mueran!", Wilbur gruñó.

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