Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 2537

"Así es. ¿Por qué lo divino usaría un cuerpo mortal como sacrificio de todos modos? Creo que no deberíamos dificultarles las cosas a los niños. Si oramos sinceramente por la lluvia, seguramente recibiremos el favor del Señor Dragón. La lluvia definitivamente vendrá".

Todos dieron sus opiniones y casi todos creían que los niños no debían ser sacrificados. Sintieron que debían buscar otra forma de ofrecer sacrificios al Señor Dragón. La hermosa y delgada mujer le lanzó una mirada a Stetson y parecía frustrada.

Stetson miró amenazadoramente a todos y finalmente fijó su mirada en Wilbur. Rápidamente se acercó y dijo: "No me pareces familiar, amigo. No eres un residente de Aldea del Arroyo, ¿verdad?".

Wilbur se sorprendió al escuchar eso y respondió: "Así es, no lo soy. Solo soy un transeúnte y vi tu ritual de sacrificio, pero como esto va en contra de la voluntad del Señor Dragón, por favor ten piedad de los niños".

"Em...", Stetson murmuró.

Parecía preocupado al escuchar eso. Wilbur podía decir que Stetson tenía otro motivo, pero no era demasiado tarde para cambiar las cosas. Wilbur creía que ningún padre con buena conciencia estaba dispuesto a matar a sus hijos.

"Los niños son inocentes, señor", Wilbur dijo en voz baja.

De repente, un hombre mayor con cabello blanco se acercó. Miró a Wilbur de arriba abajo, luego sus ojos se abrieron de par en par en estado de shock mientras exclamaba: "Él... ¡Él es un cultivador! Este tipo acaba de usar magia demoníaca para confundir a todos. ¡No confíen en él! Rápido, átenlo para que no pueda usar sus manos para lanzar más hechizos malignos".

Algunos aldeanos fuertes se acercaron con cuerdas cuando escucharon eso, intentando atar a Wilbur. Wilbur habló rápidamente: "¡Espera! ¿Por qué no me crees?".

El anciano tembló por todos lados, señaló a Wilbur y dijo: "¡Cultivador maligno! ¿No sabes que en nuestro pueblo no ha llovido durante tres años? Si el Señor Dragón realmente se preocupara por nosotros, habría llovido hace mucho tiempo. Estábamos planeando sacrificar niños y niñas por el favor del Señor Dragón. Seremos bendecidos con lluvia si el Señor Dragón está feliz, pero no esperábamos que interrumpieras nuestro plan. Interrumpiste nuestro sacrificio, y esto ofendería al Señor Dragón. ¡No puedes ser perdonado! ¡Atrapenlo!".

Wilbur se sintió impotente, pensando que los aldeanos eran demasiado tontos. Dijo: "Tengo una forma de pedir lluvia. Solo dame una oportunidad, y mientras no lastimes a los niños, puedo ayudarte".

"Está bien, como quieras", dijo.

Pronto, Wilbur se vio rodeado por la multitud y lo llevaron a una habitación. Las dos mujeres trajeron algo de pan, pollo asado y vino por la tarde. Querían agradecerle a Wilbur por salvar a sus hijos.

"Gracias por ayudarnos, señor. Le trajimos algo. Por favor, disfrútelo", dijeron.

"Gracias", Wilbur dijo.

Wilbur comió la comida y bebió el vino que las dos trajeron, luego cayó en un sueño profundo. No sabía cuánto tiempo había estado dormido hasta que escuchó el canto de un gallo afuera, lo que finalmente lo despertó.