Un dragón blanco apareció con un rugido, lanzando a Edmund al aire antes de atacarlo con sus garras y cola varias veces. Finalmente, el dragón fue aplastado por el aura de energía de Edmund, quien se quitó la sangre de la comisura de la boca mientras miraba a Wilbur en estado de shock. "No puedo creer que hayas escapado de mi Maldición de Gólem. ¡Sabía que eras un cultivador del clan dragón, jajaja!".
Edmund echó la cabeza hacia atrás, riendo a carcajadas.
"¿De qué te ríes?", Wilbur preguntó.
La sonrisa de Edmund se desvaneció, mirando a Wilbur. "Me estoy riendo de mí mismo, por supuesto. Todo este tiempo estuve celoso que fueras un cultivador del clan dragón, ¡pero ahora sé que solo me estaba envidiando a mí mismo todo el tiempo!".
"¿Qué?".
La incredulidad brilló en los ojos de Wilbur, lo que solo hizo que Edmund se riera más fuerte. "Sí, me escuchaste bien. Yo también soy un cultivador del clan dragón. Oh, Wilbur. Pensaste que eras el único cultivador del clan dragón aquí, ¿no? ¡Jajaja! Bueno, eso no significa nada para mí ahora".
Un aura de energía negra comenzó a irradiar de Edmund, varias veces más poderosa de lo que había sido. Edmund murmuró un hechizo, aterrizando en el suelo para lanzar un ataque hacia Wilbur.
Una gigantesca garra de dragón negro apareció en el aire, golpeando a Wilbur con saña. Se movió demasiado rápido para que Wilbur reaccionara, y todo lo que pudo hacer fue bloquear las afiladas garras con sus manos.
El suelo comenzó a agrietarse, hundiendo a Wilbur hacia abajo. Las Montañas Pájaros Bermellón se consideraban terrenos volcánicos, y la lava había endurecido extremadamente el suelo.
Ahora, sin embargo, las garras del dragón negro habían abierto el suelo a través del cuerpo de Wilbur.
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