Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 330

Wilbur solo decía eso para que ambas partes dejaran de discutir.

Además, sus compañeras de clase eran todas gente normal. Wilbur no quería que se vieran arrastrados a disputas inútiles de ricos como esta.

Una persona normal y corriente seguramente tendría fantasías extremas si presenciara algo así, e incluso podría afectar a su vida después de esto.

Por desgracia, Wade oyó las palabras de Wilbur y se volvió bruscamente. "Oye, ¿puedes largarte si tienes miedo? No hay nada en la ciudad Seecher de lo que no pueda ocuparme".

Reggie se encogió de hombros ante Wilbur. No había mucho que él pudiera hacer.

Wilbur suspiró, volviendo al carrito mientras observaba a los guardaespaldas de James.

Aquellos dos hombres estaban extremadamente en forma y también eran cultivadores de nivel Aura. Había otro hombre más delgado, que probablemente era el secretario de James.

Los dos guardaespaldas, sin embargo, eran lo suficientemente poderosos como para ser considerados una amenaza. Si ninguno de los hombres de Wade era al menos cultivador de nivel Aura, estaría librando una batalla perdida.

James probablemente tenía gente aún más poderosa a sus órdenes para actuar con tanta arrogancia.

Muy pronto, los guardaespaldas de Wade llegaron al lugar. Detrás de ellos había más de veinte guardias, todos armados.

Al ver a los guardias, Wade se animó un poco y llamó a James. "¡Oye, Chuke! A ver quién tiene que largarse hoy de aquí".

James se dio la vuelta. Murmuró algunas cosas más en el teléfono antes de colgar y caminar lentamente hacia Wade, mirando a los guardias detrás de él y ladrando una carcajada.

Wade se quedó sin palabras.

James se echó a reír. "¿Eso es todo lo que tienes?".

Wade apretó los dientes y fulminó a James con la mirada. "¡No te pongas tan arrogante! Mi hombre del distrito de Ciudad del Este no tardará en llegar. Me gustaría ver cómo le das una paliza".

No era ninguna sorpresa que Wade conociera a gente del distrito de Ciudad del Este, teniendo en cuenta su posición.

Sin embargo, James parecía completamente imperturbable, sonriendo mientras decía: "Ven a por mí. Estaré esperando".

Wade hizo una mueca, mirando a sus guardias en silencio.