Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 570

Yanfren no pudo dormir nada la noche anterior. Tenía ojeras y se sintió intranquilo durante todo el camino.

Tras llegar al Pueblo Colina, el trío condujo hasta las tumbas ancestrales de una colina.

Era una tumba enorme donde estaban enterrados todos los antepasados de los habitantes del Pueblo Colina.

El trío llegó a la tumba del padre de Yanfren. La tumba se había abierto, dejando al descubierto el ataúd podrido que había en ella.

Yanfren gritó de terror al verlo y corrió rápidamente a esconderse en la distancia.

Wilbur frunció el ceño y dijo: "Sigue siendo tu padre, aunque sea un fantasma. ¿De qué hay que tener miedo?".

"¡Aunque sea mi padre, sigue siendo un fantasma! ¿Cómo no voy a tener miedo?". Yanfren se negó a acercarse a la tumba.

Wilbur sacudió la cabeza y luego agitó la mano, abriendo la tapa del ataúd.

Vieron un cadáver tendido en su interior. Las ropas que llevaba estaban en mal estado y había sangre por todo el cadáver.

En un pueblo, los entierros se solían sellar bajo varias capas y luego se enterraban con tierra fina. La tumba se sellaba herméticamente y lo normal era que el cuerpo se conservara bien durante varias décadas. Sin embargo, era anormal que el cadáver estuviera cubierto de sangre. ¿Cómo es posible que un cadáver de varias décadas siga manchado de sangre?".

Wilbur se inclinó más cerca del ataúd y olfateó, luego dijo: "Esto no es sangre humana".

Ryder también intentó olerla y dijo: "Huele como una mezcla de sangre de pollo y de perro".

Wilbur se quedó pensativo y dijo: "Alguien está gastando bromas con el cadáver".

"¿Qué quieres decir, señor?", preguntó Ryder.

Wilbur contestó: "Alguien está controlando el cadáver y luego lo ha manchado de sangre para asustar a Yanfren. Es una estafa para conseguir dinero".

"Es posible. Pidieron que se dejara dinero detrás de la lápida. ¿Por qué un fantasma necesitaría dinero en efectivo?", comentó Ryder.

Wilbur asintió con la cabeza. "Tienes razón. Sin embargo, esa persona fue capaz de controlar cadáveres. Definitivamente es un cultivador".

"¿De qué estás hablando? Hemos venido a ayudar a Yanfren con unos recados", respondió Wilbur.

Justo entonces, Yanfren empezó a saludar al calvo desde lejos y dijo: "¡Señor Stagen! Soy yo, Yanfren".

"¡Eres tú de verdad! ¿Cuándo volviste?", preguntó el calvo con una brillante sonrisa.

Yanfren aún no se atrevía a acercarse a la tumba y contestó desde la distancia: "Solo he vuelto para hacer unos recados".

El calvo miró a Yanfren y luego a Wilbur y Ryder. Dijo despacio: "No me importa lo que estén haciendo, pero vandalizar la tumba afectará a la paz de mis antepasados. Eso es inaceptable. Tienes que compensarnos".

"¿Quiénes son ustedes?", preguntó Wilbur.

El calvo se rio y miró a Yanfren. "Dile quién soy".

Yanfren avanzó tímidamente y se detuvo a unos metros de Wilbur: "Él es Booker Stagen, el secretario de nuestro pueblo".